La compañía que preside Mario Armero ha pagado hoy en el parquíé la resaca de la noticia del viernes sobre sus filiales, que pidieron voluntariamente el preconcurso de acreedores. Este lunes, los títulos de Ezentis han cerrado en el Mercado Continuo con un descenso del 24,84%, hasta los 0,242 euros.
El valor ha llegado a despeñarse hasta un 26% y ha marcado un mínimo de 0,20 euros por título. El consenso de mercado recogido por FactSet le asigna a Ezentis un precio objetivo de 0,55 euros.
Los títulos de su filial de audiovisuales, Víértice 360º, tampoco han registrado una buena sesión: han caído un 2,29%, hasta los 0,213 euros.
Delicada situación financiera
A última hora de la tarde del viernes, Ezentis comunicó a la CNVM que los consejos de administración de Asedes Capital y Ezentis Infraestructuras, ambas filiales del grupo, habían solicitado voluntariamente el preconcurso de acreedores.
Con esta medida, que Armero ha asegura que es coyuntural, la compañía obtiene un plazo extra de cuatro meses para renegociar la deuda de las filiales con los acreedores, iniciar un plan de viabilidad y encontrar un socio que aporte recursos para refinanciar la filial.
Las empresas informaron de que tomaron la decisión para garantizar su viabilidad y paliar su falta de liquidez, que achacaron al descenso de la inversión en obra pública y privada, así como a los impagos y a la restricción del críédito.
Estas dos sociedades formaban el Grupo Sedesa, propiedad del constructor Vicente Cotino, que las vendió al grupo hace un año por 30 millones de euros. No es la primera vez que la herencia de Javier Tallada hace tambalearse a la empresa en bolsa. La pasada semana, la tecnológica registró pronunciadas caídas anunciar que se veía obligada a reformular sus cuentas para sanear su balance y conseguir que los auditores emitan una opinión sin salvedades sobre los números del pasado ejercicio.
