El principal problema de Francisco González se llama Artur Mas. El BBVA, que el miíércoles presentó unos resultados trimestrales algo peores de lo esperado, tiene como principal deudor -es decir, como el cliente que le debe más dinero- a la Generalitat de Cataluña, con una exposición que roza los 3.500 millones, según fuentes conocedoras de la situación. Un portavoz del banco declinó hacer comentarios sobre esta información, excusándose en que "no podemos hablar de clientes".
Este enorme riesgo con el Gobierno catalán, canalizado a travíés del antiguo Banco de Críédito Local (parte de Argentaria), es motivo de honda preocupación en la Torre de Azca, según las fuentes consultadas, en vista de la dramática situación de las finanzas públicas de esta comunidad. Además, el haircut (quita) en la valoración de los críéditos a las administraciones públicas que ha incluido la EBA en sus cálculos le supone a BBVA 1.100 millones de los 7.087 que díéficit de capital actual, lo que da idea de la magnitud del problema. Y eso, con un recorte de valoración sólo de entre el 3% y el 4% del valor de estos críéditos, según distintas fuentes.
Como es sabido, Mas ha acometido importantes ajustes del gasto en Sanidad y servicios sociales ante la imposibilidad de financiarlos, y está en plena colocación de una emisión de 4.000 millones de 'bonos patrióticos' porque ha reconocido que, sin ese dinero, no podría pagar las nóminas de los empleados públicos.
En esas condiciones, no es de extrañar esta preocupación de BBVA por una exposición que es mayor que la de cualquier otro cliente indivudual, incluidos los grandes constructores y promotores inmobiliarios -el gran quebradero de cabeza de la banca española-. Como es sabido, el críédito a las administraciones públicas se considera "riesgo cero" y no consume capital ni requiere provisiones. Por eso, si este críédito entra en mora, su provisionamiento supondría un serio quebranto para la entidad.
La Generalitat es el principal deudor de BBVA, pero el BBVA no es el principal acreedor de la Generalitat; es decir, el Gobierno autónomo le debe más dinero todavía a otra entidad. Se trata de La Caixa, según las fuentes consultadas, algo que parece lógico dado que es la mayor institución financiera de la comunidad. Un portavoz de La Caixa tampoco hizo comentarios al respecto. La deuda total de Cataluña con las entidades financieras asciende a 16.933 millones según el Banco de España, la mayor de todas las autonomías.
Los bancos dan la espalda a la Generalitat
Según las fuentes, la última parte de esos 3.500 millones provienen de un sindicado de 1.000 millones concedido en 2010 (en el que no entró el Santander haciendo un feo al tripartito). Esta elevada exposición de BBVA provocó que, hace un año, rechazara entrar en un nuevo sindicado para no incrementar aún más el riesgo. El banco presidido por Emilio Botín tampoco entró -aunque em 2010 concedió un críédito bilateral de 400 millones, ya con Mas en el poder despuíés de habíérselo negado a Montilla-, y la ausencia de los dos grandes hizo que los pequeños tampoco entraran.
Esto dejó al entonces president Montilla a los pies de los caballos, y le forzó a lanzar la primera emisión de 'bonos patrióticos', en los que tuvo que pagar un elevadísimo interíés del 4,25% a un año (en la emisión actual, el tipo se ha incrementado todavía más hasta el 4,75%). Se sondeó el mercado institucional, pero la conclusión fue que no habian garantías de colocación y que fracasaría. Por eso hubo que optar por la emisión minorista que ahora vence y se está tratando de renovar.