Por... HERNíN GONZíLEZ RODRíGUEZ
Me han llamado la atención algunos artículos aparecidos en la prensa mundial sobre un nuevo diseño de vehículos para utilizar el nitrógeno líquido como combustible. Se afirma que pueden competir con los vehículos elíéctricos movidos por baterías o por las celdas de hidrógeno y que los de nitrógeno no producen ninguna emisión. ¿Los automóviles del futuro?
El motor se mueve debido a la presión causada por el nitrógeno líquido al convertirse en gas. Entiendo que la idea no es completamente nueva, puesto que en el año 2000 en la Universidad de Washington construyeron un prototipo que alcanzó unos 35 kilómetros por hora.
La compañía promotora de la idea es una firma inglesa llamada Dearman Engine Company -DEC- y ya como que tiene planes de desarrollar un prototipo comercial en 2013 con la participación de prestigiosas universidades de su país. Que inicialmente van a fabricar motores para los montacargas.
Manifestó su inventor en una entrevista, el señor Peter Dearman, que íél había ideado un motor durante un programa de doctorado de cuatro años, en el cual se inyecta un líquido anticongelante, como el metanol, mezclado con agua, en la cabeza del pistón, exactamente antes de inyectarle el nitrógeno líquido. El resultado de esto es que la expansión de líquido a gas se realiza dentro del cilindro.
En optimizar la inyección del nitrógeno líquido en el cilindro radica la mayor novedad del invento. Todo lo demás está inventado. El aire está constituido por 78% de nitrógeno y es posible extraerlo en planticas de licuefacción movidas por energía renovable. Hoy día es un subproducto de la extracción del oxígeno y un litro de nitrógeno líquido cuesta la díécima parte de uno de leche.
El anticongelante produce una expansión isotíérmica, es decir, que la temperatura no se eleva y es por ello muy eficiente y económico. El nitrógeno líquido ya se utiliza en las cadenas de almacenamientos y de transporte de alimentos que requieren refrigeración.
Hay que almacenarlo bien aislado y tolera la presión atmosfíérica, pero un pequeño aumento de la temperatura puede volverlo gaseoso y expandirlo casi 700 veces.
La revista The Economist afirma que kilo por kilo, el nitrógeno líquido almacena la misma energía que guardan las baterías de iones de litio que se usan en las computadoras portátiles, en los telíéfonos móviles y en los vehículos elíéctricos. Los vehículos de nitrógeno compiten con los elíéctricos en rango y desempeño.
La mayor diferencia estriba en que los vehículos movidos por nitrógeno líquido son mucho más baratos que los elíéctricos, un poco más de la mitad del precio de estos, porque sus motores no tienen que tolerar temperaturas elevadas y, por tanto, podrán ser fabricados con aleaciones baratas, con plásticos incluso, concluye The Economist.