Como cada mes los ministros de finanzas de la Zona Euro, Eurogrupo, y de la Unión Europea (UE), Ecofin, se reúnen para repasar la situación de la economía de la región. Sin embargo, la cita de septiembre no se produce un lunes y un martes, ni tampoco se celebra en Bruselas. Los encuentros tendrán lugar hoy, viernes 13, y mañana, sábado 14, y se producirán en Vilna, capital de Lituania.
Será la primera oportunidad que tienen los políticos del Viejo Continente de discutir la propuesta del mecanismo único de resolución bancaria. Medida que pasa por la creación de un fondo común de 55.000 millones de euros y da a la Comisión Europea (CE) el poder de decidir si un banco quiebra o no.
Tratarán de avanzar pues en la unión bancaria y se enfrentarán, una vez más, a la oposición de Alemania que se ha endurecido durante la campaña electoral del país. De hecho, cabe destacar que este evento se produce justo una semana antes de que los votantes germanos elijan a su nuevo o nueva canciller.
La república germana, y otras naciones, luchan por mantener el control regulatorio sobre su sector financiero, así como por protegerse de los pasivos de otros. Sin embargo, cabe recordar las palabras que el pasado 29 de agosto pronunciaba el comisario europeo de servicios financieros Michel Barnier: “No hay plan B, este pilar de la unión bancaria debe implantarse, es necesario para la estabilidad de la Zona Euroâ€.