DIA ha puesto el cartel de se vende a una parte de su negocio en Francia ante la continuada caída de los ingresos, según aseguran fuentes financieras conocedoras de los planes de la compañía. En concreto, la distribuidora se desprenderá de su actividad en el norte del país vecino, aunque no se descarta que tambiíén venda sus supermercados en París y el sur. La operación, en todo caso, está en una fase inicial y, previsiblemente, no se cerrará hasta los primeros meses de 2014.
Distribuidora Internacional de Alimentación (DIA) ya ha abierto el cuaderno de venta de sus activos en el norte de Francia, que en tíérminos de ebitda (resultado bruto de explotación) “ya no aportan nada†a la compañía que lidera la venezolana Ana María Llopis. Aún no ha recibido contestación de potenciales compradores, que “serán retailers (pequeños comercios)â€, señalan fuentes del mercado. Otra cuestión sería la venta de los negocios de París y el sur de Francia, donde presenta mejores resultados. En este caso, entrarían en juego “distribuidores grandesâ€, añaden.
DIA no hace comentarios sobre una operación que, según los analistas consultados, el mercado aplaudirá. El impacto será “doblemente positivoâ€: de un lado, “el psicológico, porque hay muchos inversores a los que no les gusta nada la actividad en Francia†y, por otro, el económico, ya que “apenas restaría ebitda (en el caso del negocio del norte) y los márgenes subiríanâ€. De hecho, desde una entidad señalan que esta venta, junto con la enajenación de las tiendas en Pekín, “afloraría el valor en torno al 10%â€.
En cuanto a desprenderse de sus centros en París, que dan beneficios, los expertos son más ambiguos. “Lo mejor es quedarse con París y el sur de Francia, aunque si lo vendieran tambiíén sería positivoâ€, apuntan.
Los analistas no se atreven a fijar un precio para el negocio del norte de Francia debido a que en este momento el ebitda “es negativoâ€, pero, de cualquier forma, “es bajoâ€. Distinto será si se incluye el negocio de París y el sur. En este caso, estiman un horquilla de entre 300 y 400 millones de euros, “como máximo†(multiplicar por 5 el ebitda actual, que se sitúa entre 60 y 65 millones).
GRECIA, TURQUíA, PEKíN...
DIA está presente en Francia desde su integración en el Grupo Carrefour en el año 2000. Sin embargo, “las numerosas leyes que permiten tirar los precios a píérdidas y una cierta competencia desleal, además de la crisis generalizada en los hipermercadosâ€, explican fuentes financieras, han provocado “el deterioro de sus cuentas†en el país galo. Para este año, las estimaciones son que el ebitda caerá el 20%.
DIA abundará así en su política de desinversiones, despuíés de salir de Grecia hace dos años y de abandonar Turquía este mismo verano tras vender sus activos (1.093 tiendas, de las que 614 estaban en propiedad) por 30,9 millones. Asimismo, la multinacional ha enajenado sus activos en Pekín para centrar sus esfuerzos en el continente asiático en Shangai.
En 2010, Francia era el segundo segmento más importante para DIA (ver cuadro), por detrás de Iberia (España y Portugal). Entonces, registró unas ventas brutas por enseña de 2.796,9 millones de euros y un ebitda de 96,3 millones. En el primer semestre de este año apenas ingresó 1.118,7 millones, un 10,5% menos que en mismo periodo, y el resultado bruto de explotación fue de 30,7 millones, frente a 41,8 millones un año antes.
El deterioro de los resultados en Francia ha estado acompasado por la reducción del número de tiendas, que en tres años y medio ha pasado de 936 a 888 y por la rebaja de las inversiones. Sólo hace dos años, en 2011, Francia fue el país con mayor capex, 138 millones. Desde entonces, DIA ha disminuido progresivamente su importe. En 2012 lo redujo un 34%, hasta 92,2 millones, y en los primeros seis meses del año apenas ha destinado 21,4 millones en el país galo.
Los esfuerzos de la cadena de supermercados pasan en este momento por la integración del negocio en España de la alemana Schleker, adquirido en septiembre del año pasado, y por el crecimiento de su negocio en los países emergentes como Brasil y, en menor medida, Argentina.