Primer nivel roto. La familia Masaveu ha superado el 1% del capital de Liberbank, entidad por la que lleva apostando con fuerza desde que salió a bolsa y donde se ha convertido ya, por míéritos y chequera propia, en uno de sus mayores accionistas.
En concreto, según fuentes financieras, con las dos últimas operaciones que ha llevado a cabo en noviembre, la saga asturiana ha conseguido convertirse en uno de los cinco mayores accionistas del banco, por detrás de las tres cajas –Cajastur, Cantabria y Extremadura-, que controlan casi el 70% del capital, y junto a algunos fondos de inversión.
En concreto, los Masaveu controlan 14,8 millones de acciones de la entidad, equivalentes al 1,02% del banco y valoradas en casi 9 millones de euros, a tenor de la capitalización actual de la compañía, que cotiza en 0,6 euros por acción, frente a los 0,4 euros a los que se estrenó el pasado mayo.
A este poderío que están demostrando los Masaveu en el sector financiero se une el paso de gigante que han dado en la elíéctrica portuguesa EDP, donde está presente a travíés de la sociedad Oppidum Capital en alianza con Liberbank.
La semana pasada, esta firma adquirió otro 1,18% de la energíética lusa en una operación fuera de mercado que le permitió alcanzar el 7,18%. Con este movimiento, el frente asturiano se ha convertido en el segundo accionista EDP al superar a Iberdrola, que posee el 6,66%
El buen momento de Liberbank
Desde que la familia Masaveu empezó a comprar títulos de Liberbank en el parquíé, la entidad se ha revalorizado un 33%, ya que sus primeras adquisiciones las realizó a un precio medio de 0,451 euros por acción, justo despuíés del estreno bursátil del banco. Frente a este importe, la saga tuvo que desembolsar 0,60 euros en su última operación, realizada el pasado 28 de noviembre, cuando se hizo con otro 1,6 millones de acciones.
Pero el mercado no es la única vía que han utilizado los Masaveu para crecer en Liberbank. Las obligaciones convertibles, que junto a las preferentes fueron emitidas por las antiguas cajas, han sido un atajo para llegar a superar ese 1%. El pasado verano, adquirieron estos híbridos a ahorradores y aprovecharon la ventana de liquidez de noviembre para convertirlos a un precio de 0,58 euros por acción. Una jugada que ha permitido a la familia sumar otros 2,2 millones de títulos a su participación.
Los Masaveu no son los únicos representante de la nobleza empresarial española presentes en el capital de Liberbank. La gestora Bestinver, el financiero Juan Abelló y el inversor indio Ram Bhavnani tambiíén figuran entre los grandes nombres que han decidido apostar por esta historia de reestructuración.
De hecho, según fuentes del mercado, en los últimos meses Liberbank está consiguiendo atraer a un importante número de fondos extranjeros a su capital, a pesar de que su free float apenas alcanza a una tercera parte de todo su capital. Entre los últimos en decantarse por el valor se encuentra el todopoderoso Blackrock, que según datos de Bloomberg se ha hecho con el 0,06% del banco en los últimos tiempos.
Al rescate de Espirito Santo
El aumento de participación de Oppidum Capital en EDP se ha llevado a cabo a la sombra de Banco Espirito Santo, que el pasado 2 de diciembre decidió vender el 1,18% del capital de la elíéctrica, en una operación valorada en casi 100 millones de euros.
Esta venta, según publica la prensa lusa, vino precedida por la necesidad de la entidad portuguesa de conseguir liquidez para mejorar su ratio de capital y, de hecho, con esta desinversión logra unas plusvalías superiores a los 30 millones de euros.
