Una de las principales tendencias actuales en el mercado de fusiones y adquisiciones es la compra de empresas de Norteamíérica por parte de grupos europeos, cuyos ejecutivos buscan al otro lado del Atlántico el crecimiento económico y los desarrollos tecnológicos que no encuentran en sus países de origen.
El aluvión de operaciones fue propulsado el año pasado por compañías alemanas como Merck, Bayer, ZF Friedrichshafen, SAP y Siemens. El testigo ha sido tomado ahora por las firmas españolas Repsol, Iberdrola y Ferroatlántica, que están completando acuerdos en Canadá y Estados Unidos.
En 2014, el valor de las adquisiciones europeas en Norteamíérica ascendió a 128.000 millones de euros, ríécord desde 2007, según datos de la firma de información financiera Dealogic. En los dos primeros meses de 2015, esas operaciones transatlánticas se han situado en otros 22.000 millones, con lo que la inversión total en 14 meses asciende a 150.000 millones.
Las agencias de calificación de deuda están vigilando este proceso de expansión. Richard Morawetz, analista de Moody’s, indica que las compras en Norteamíérica han supuesto la rebaja del ráting de algunos grupos europeos. Pero matiza que «las transacciones pueden potenciar a medio plazo los beneficios de los compradores, gracias a las mejores perspectivas de crecimiento económico de Estados Unidos y a la competitividad de costes de sus empresas».
Por ejemplo, la elíéctrica Iberdrola, al adquirir UIL Holdings para reforzarse al noreste de Estados Unidos, «está reciclando capital en áreas de crecimiento más atractivo y seguras que España», afirman los analistas de JPMorgan. Según estimaciones de RBC Capital Markets, el PIB estadounidense crecerá un 2,8% anual en 2015 y 2016, el doble que en la zona euro.
Otras empresas apuestan por el mercado norteamericano para tener acceso a sus innovaciones tecnológicas y operativas. La farmacíéutica Shire se ha hecho con NPS Pharmaceuticals para integrar su portfolio de nuevos medicamentos contra enfermedades del aparato gastrointestinal.
La revolución petrolera americana es otro objetivo de los grupos europeos. Al comprar Talisman Energy, Repsol entra en yacimientos donde se utilizan nuevas tíécnicas de extracción de crudo. Siemens se ha hecho con Dresser-Rand, un fabricante estadounidense de equipos para esa industria. En ambos casos, los directivos esperan que el impacto de la caída de precio del crudo en el valor de sus adquisiciones sea compensado por el acceso a la nueva tecnología energíética.
La fuerte revalorización del dólar es el principal riesgo para esta ofensiva europea, según Taron Wade, analista de Standard & Poor’s. «Podría haber menos transacciones de este tipo durante 2015 respecto al año pasado, por la caída del euro en relación con el dólar, lo que encarece las adquisiciones». Según Morawetz, la situación de las divisas «puede ser relevante para quienes desean crear una base exportadora en Estados Unidos, más que para las empresas que persiguen el crecimiento en el mercado domíéstico americano».
En las últimas díécadas, las empresas españolas se movieron casi al unísono en su expansión en Latinoamíérica y luego en Reino Unido. El próximo territorio por conquistar puede ser Norteamíérica, incluyendo a Míéxico cuya economía está muy ligada a la de sus vecinos.
Tras las operaciones de Repsol e Iberdrola, los analistas creen que Santander, con su capital reforzado gracias a la ampliación del mes pasado, podría pensar en comprar las participaciones de los minoritarios en su filial de consumo en Estados Unidos o en su división mexicana. BBVA, presente ya en Texas y Míéxico, está adquiriendo firmas nortamericanas especializadas en distribución de productos bancarios a travíés de canales digitales.
Telefónica se plantea participar en alguna operación de concentración en Míéxico para afrontar la ofensiva en este mercado del gigante estadounidense AT&T. La aseguradora Mapfre ha dicho estar dispuesta a realizar compras en Estados Unidos. La farmacíéutica Almirall, que entró en ese país con la compra de Aqua Pharmaceuticals, busca más integraciones de firmas dermatológicos.
Las constructoras Ferrovial, ACS y Acciona pujan por todo tipo de concesiones en Norteamíérica, mientras que Inditex sigue comprando edificios en las principales ciudades para sus tiendas. Y Mahou podría buscar nuevas operaciones tras comprar el 30% de una cervecera artesanal de Michigan
Roberto Casado
