Fiebre verde en el capital riesgo
Publicado en Expansión por E. Calatrava
Una decena de fondos ligados a grandes patrimonios españoles y europeos se lanza a invertir en energías renovables en España y Europa del Este con más de 600 millones en el bolsillo.
Los tiempos revueltos que vive la economía española están llevando a los inversores a tratar de asegurar el tiro. Rentabilidades más o menos estables, aunque sean menores a las de otros tiempos, son cada vez más demandadas.
Una decena de fondos de capital riesgo, que cuentan entre sus inversores con destacadas fortunas españolas y europeas, se han inscrito en el último año en el registro de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) con el foco puesto en los megavatios verdes. En total, cuentan con más de 600 millones de euros para invertir en proyectos en España y Europa del Este.
Marco legal
La regulación favorable que prima la producción elíéctrica procedente de fuentes renovables, como la eólica y la fotovoltaica, está fomentando esta tendencia. Si bien, la menor disponibilidad de críédito, por las restricciones de liquidez de las entidades financieras, supone cierta barrera.
Estas iniciativas se inspiran en la experiencia de Eolia, gestora creada por la firma de servicios financieros N+1 y varios inversores, entre ellos, el ex vicepresidente de Jazztel, Miguel Salís. Eolia Renovables, hoy uno de los principales grupos del país en energías renovables, con más de 37 parques eólicos, trató en 2007 de salir a bolsa, pero el desfavorable clima económico dio al traste con sus planes.
Incorporaciones
Taiga Mistral, sociedad fundada por el ex consejero delegado de Hidrocantábrico, Antonio Tuñón, y que tiene como inversores a Caja de ívila y Caja Navarra, prevíé invertir más de 300 millones de euros en los próximos tres años en proyectos de energías renovables en Europa del Este.
Calíéndula de Inversiones, sociedad de capital riesgo creada por los fundadores de la empresa burgalesa de energías renovables Gecal, es otro de estos inversores verdes. El grupo, fundado, entre otros, por el empresario Miguel Míéndez Pozo y que cuenta con Santander Private Equity en su capital, tiene como objetivo alcanzar una producción de entre 1.000 y 1.500 megavatios en 2012.
Abraxa Capital Privado, fundada por David de Francisco, ex directivo del fondo francíés PAI Partners, y Carmelo Medrano, procedente de PricewaterhouseCoopers, tambiíén tiene intereses en las energías renovables. Abraxa, que cuenta como inversor con la familia Lladró, fundadora de la empresa de ingeniería Tíécnicas Reunidas, adquirió hace un año un parque fotovoltaico de 20 megavatios en Abertura (Cáceres).
Además, otra gran fortuna, la del empresario coruñíés Manuel Jove, fundador de Fadesa, se ha sumado la interíés por el sector. Su hólding Inveravante, dotado con 4.000 millones de euros obtenidos con la venta de su grupo a Martinsa en 2006, creó con otros socios gallegos Gaelsa para promover parques eólicos. La sociedad ha quedado fuera de un concurso organizado por la Xunta para instalar 2.235 MW en la región.
Otras entidades, como Eland Energías Renovables y Green Alliance, tambiíén participan en el negocio de la energía limpia. Por su parte, Qualitas Equity Partners, que tiene como inversor a la familia Polanco, es accionista junto con la familia Gallardo de Fotowatio, empresa que ha invertido más de 400 millones en promover plantas fotovoltaicas en España.
La francesa Demeter participa en el fabricante español de paneles solares Eurener.
Nuevo frente
Junto con Eolia, otras firmas como Taiga Mistral, Abraxa y Demeter, entre otras, han apostado por la inversión en el sector de las energías renovables en España y en el extranjero. Una regulación favorable está animando el sector.