Por Luis Corvera Gálvez
"Es un míétodo real, comprobado y mejorado de obtener grandes ganancias", aseguraba la publicidad de Broker Market International (BMI). ¿Cómo? Ofrecía a las personas naturales la posibilidad de unirse a otras, formar un fondo que les permitiera invertir en los grandes mercados internacionales y, con ello, obtener utilidades significativas.
Dicha empresa, ubicada en Surquillo, tenía tres planes de inversión, según el monto del que dispusieran los clientes (entre US$100 y US$250). A cambio de sus fondos, prometía un 50% de interíés en tres meses, algo que tomaría casi 7 años conseguir por un depósito a plazo en un banco grande.
Desde el 2003 hasta octubre del 2008, la compañía nunca incumplió con los pagos trimestrales a sus inversionistas (hasta ahora no se ha determinado cuántos clientes llegó a tener), por lo que durante setiembre y octubre del año pasado captó alrededor de US$100.000 diarios, algo que motivó a la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP a darle una mirada.
Tras determinar que la firma utilizaba el dinero de los últimos inversionistas para pagarles los intereses a los primeros y no tener ningún tipo de respaldo en activos para garantizar la devolución del capital de quienes les aportaron recursos, se optó por la intervención el 17 de octubre. El cierre motivó el repudio de los inversionistas hacia la SBS, pues la empresa nunca falló en pagar los intereses.
¡VIVA LA PIRíMIDE!
¿Por quíé no se le permitió a la compañía seguir operando si nunca tuvo problemas?, es la queja de varios clientes de BMI y de otras firmas que utilizan este tipo de esquemas, denominados piramidales.
Pues bien, es cierto que no tenía problemas y no los iba a tener en por lo menos unos diez años más (eso depende de la tasa de interíés ofrecida y de la capacidad de los inversionistas de reinvertir su dinero) si lograba crecer hacia provincias y nadie le cuestionaba nada. En la medida que lograse atraer a más personas de los que se van, hubiese sido posible sostener la estafa, pero una vez que se terminaran los posibles clientes, habría caído.
Hay que indicar que no solo las personas que carecen de información caen en esta trampa, tambiíén van los que saben que se trata de una pirámide y tratan de hacer dinero fácil. Ellos son los primeros en retirarse.
El caso más dramático en el Perú fue el de CLAE (1993), por el que hasta ahora hay mucha gente reclamando.
En Colombia, el presidente ílvaro Uribe tuvo que declarar el estado de emergencia en ocho provincias de su país, tras cerrar varias instituciones que hasta el 2008 han operado bajo este esquema. Es más, BMI e Inverplan, intervenidas en octubre por la SBS, tenían accionistas colombianos que quisieron exportar su experiencia.
¿Cí“MO LAS DETECTO?
El mejor míétodo para detectar una pirámide es ver la tasa de interíés que se ofrece: ninguna inversión real le puede asegurar un retorno de 15% al mes, pase lo que pase con la economía del país y del mundo. Además, dude si a cambio de altas tasas le piden que traiga a tres o cuatro personas, pues son ellas las que aportarán el dinero con el que le pagarán a usted sus intereses.
Además, comentan en la SBS, antes de invertir su dinero en cualquier institución, asegúrese de que tiene autorización para captar ahorros o inversiones. Para ello puede visitar la página web de dicha institución (
www.sbs.gob.pe) o llamar gratuitamente al 0-800-10840.
Y si descubre a una de estas entidades fraudulentas, denúnciela al Ministerio Público.