Una demanda de la Comisión del Mercado de Valores de EEUU (SEC) y el rechazo del mercado de criptomonedas Coinbase han frustrado las esperanzas de que la XRP llegue a ser una moneda digital aceptada de forma generalizada.
Su precio ha caído a unos 0,20 dólares, frente a 3 dólares a finales de 2017.