Fusiones de supervivencia
Publicado en expansión por A. Redondo
La virulencia de las dificultades económicas propiciarían uniones defensivas entre las compañías del mismo sector. La banca y las elíéctricas podrían protagonizar estas operaciones, según los expertos.
La solución parece clara, pero ponerla en práctica va a ser más complicado. El entorno actual de restricción crediticia, consecuencia directa de la crisis, dificultará este año la actividad corporativa, tal y como ocurrió el año pasado, cuando la actividad global cayó cerca de un 30%. Barclays Capital estima que, este año, los movimientos corporativos a nivel mundial alcancen un importe máximo de 2,5 billones de dólares (1,93 billones de euros). Sería la cifra más baja desde 2004.
Una reciente encuesta realizada por UBS y Boston Consulting Group, en la que participaron 164 compañías, tambiíén confirma esta tendencia. Sólo el 21% de los encuestados espera realizar compras este ejercicio ante la restricción del críédito por la crisis. Sin embargo, el 43% de los encuestados cree que se producirán fusiones de supervivencia dentro de su sector.
Alberto Castillo, analista de Capital Bolsa, dice que lo más probable es que se realicen “fusiones pactadas, preferentemente mediante el canje de acciones, de forma que no se necesite tanta financiaciónâ€, y de carácter defensivo.
Los analistas esperan una consolidaciónen la banca mediana española
Apuestas
Los expertos consideran que estas operaciones de consolidación se centrarán en sectores muy concretos. En la bolsa española, los analistas apuntan hacia los bancos, principalmente.
En el sector bancario, las miradas se centran en las entidades medianas. Los profesionales señalan que un aumento de tamaño permitiría a los bancos reducir costes, crear interesantes sinergias e incrementar su cuota de mercado, aspectos que les ayudaría a enfrentarse mejor a la actual coyuntura.
Castillo cree que Popular ySabadell podrían unir sus fuerzas, si bien primero ambos bancos intentarán fortalecer sus balances y recapitalizarse. Julián Coca, gestor de renta variable de Inversis Banco, suma a la apuesta a Bankinter y Pastor, y cree que “probablemente sólo queden dos†bancos medianos cuando acabe la crisis.
Desde que íésta empezó, en julio de 2007, Popular cae en bolsa un 59%; Bankinter, un 47%; Pastor, un 70% y Sabadell, un 48%. El varapalo de las cuatro entidades equivale a una píérdida de aproximadamente 20.717 millones de euros en capitalización bursátil.
Las fusiones animarían la cotización de estas compañías y de las sus competidores
Santander yBBVA son vistos como compradores por los analistas que indican que podrían buscar buenas oportunidades de compra fuera de nuestras fronteras. Su único riesgo, indican, es que empeore la situación económica de los países latinoamericanos. En 2009, Santander cae un 9,93% y BBVA, un 13,86%.
Otra fusión defensiva posible sería la de La Seda de Barcelona con la petroquímica singapurense Indorama. Josep Monzó, de Gaesco Bolsa, indica que la operación sería “muy racional†tanto por cuota de mercado como por ventas, y que permitiría a La Seda reforzar su posición como líder en el suministro de PET, material que se utiliza para la fabricación de botellas de plástico.
Además, la fusión aliviaría la situación financiera de la española, que tiene una deuda elevada.
Las aerolíneas tambiíén se verán obligadas a protagonizar este tipo de movimientos. Los expertos indican que, pese a la reciente caída del crudo (del 67% en los últimos seis meses), estas compañías continúan teniendo problemas financieros. La crisis ha provocado un fuerte descenso en su demanda que no se compensa con la caída del petróleo. Una unión entre competidoras facilitaría la reducción de costes y las sinergías entre ellas.
Julián Coca espera que sean las aerolíneas norteamericanas “las que empiecen el baileâ€, pues muchas de ellas están casi en quiebra. En España, tras la fusión de Vueling yClickair, se espera la de Iberia y Brittish Airways. í‰stas dos empresas ya han comenzado las negociaciones y, si bien ahora están en punto muerto, entre otras cosas, por los problemas de la inglesa con el fondo de pensiones de sus empleados, los analistas no dudan de que se producirá.
Así reducirían los costes de ambas empresas, aumentarían su cuota de mercado (más aún si finalmente se confirma su alianza con American Airlines) y lograrían sinergias en los precios. Desde que anunciaran sus intenciones de fusión, en agosto de 2008, Iberia sube en bolsa un 1%, mientras que su socia británica se deja un 45,5%.
‘Run-run’ corporativo
Junto con estas fusiones de supervivencia, los expertos señalan que podríamos ver otros movimientos corporativos en la bolsa española. Iberdrola se coloca en el centro de la diana. Desde UBS indican que sus “activos de alta calidad y sus negocios secundarios, de los que podría desprenderseâ€, convierten a la primera elíéctrica española en un objetivo claro para potenciales compradores.
Además, señalan que la atractiva valoración de la compañía, “cuya cotización descuenta actualmente un entorno regulatorio inestable, un mercado con exceso de oferta y un alto endeudamientoâ€, la hacen interesante para inversores industriales. En lo que va de año, Iberdrola cae un 10,5%. El banco suizo considera que la gala GDF-Suez y la alemana RWE con las dos compañías que podrían intentar comprar Iberdrola.
En la industria de fondos de inversión, una de las más castigadas por la crisis, tambiíén han comenzado las alianzas defensivas, con fusiones y acuerdos entre gestoras.
Con buenos ojos
Los inversores ven con buenos ojos estos movimientos. Sólo doce valores del Stoxx 600 fueron capaces de cerrar 2008 en verde. De ellos, 8 estaban o están inmersos en movimientos corporativos. En el caso del Ibex 35, sólo Unión Fenosa, pendiente de concretar su fusión con Gas Natural, logró subir en el año.
De hecho, los expertos creen que estos movimientos alegrarían la cotización de las empresas. Primero, porque permitirían a estas empresas capear mejor la crisis. Segundo, porque reflejarían un movimiento de dinero en el mercado, cuya escasez acusa actualmente. Y tercero, ya que la reducción del número de empresas en el sector ayudará tambiíén a sus competidoras, que cotizarán con prima.