Nadie ha vendido más acciones este año que Jeff Bezos, Mark Zuckerberg o Sam Walton.
Sin embargo, un cuarto jugador inesperado ha ganado miles de millones vendiendo acciones en la compañía de su propio hijo.
Ernest García II, un multimillonario de 64 años e hijo del director ejecutivo y fundador de $ CVNA , Ernest García III, vendió acciones por valor de 3.600 millones de dólares. García II es el dueño de DriveTime, el ex padre de Carvana.
Durante la pandemia, agregó a su tesoro de acciones de Carvana con una compra de $ 25 millones en una oferta privada, durante la cual el precio de las acciones de Carvana se valoró tan bajo como $ 30. La compra convirtió a García II, quien no trabaja para la empresa, en el mayor accionista de la empresa.
Desde entonces, el precio de las acciones de Carvana se ha disparado. La compañía ahora tiene un valor de más de $ 60 mil millones, lo que le permite a García II sacar fichas de la mesa. Según el Wall Street Journal, las ventas de García II representan solo el 16% de sus participaciones .
Carvana ya ha admitido que podría ser una señal de alerta para algunos inversores. Una presentación de valores revela que las propias presentaciones de Carvana advierten que las "partes de García" no están "alineadas" con los intereses de los inversores.
En otras palabras, la familia García podría maltratar a los inversores para obtener ganancias a corto plazo.
Los académicos y los reguladores se han hecho eco de esas preocupaciones, afirmando que las revisiones del "plan de venta de acciones" de la empresa (plan 10b5-1) se han modificado con frecuencia. A las mismas partes les preocupa que la familia posea el 85% de las acciones con derecho a voto de la empresa, en total.
Sin embargo, no hay nada claramente ilegal en la estructura.
