Los productores se quejan de que hay demasiado vino.
La caída mundial del consumo de vino genera problemas para los viñedos: demasiadas uvas y demasiado vino.
El consumo mundial de vino cayó de 247 millones de hectolitros en 2017 a 221 en 2023, aproximadamente 3.500 millones de botellas de vino menos.
Los cambios en el estilo de vida de las generaciones más jóvenes y la inflación son los principales impulsores, y la industria intenta desesperadamente recuperar a los clientes y limitar la oferta.