Voy a empezar hoy este blog con una buena noticia. De acuerdo con el World Database of Happiness, España es un país feliz. En un ranking de casi 150 países, que cubre a más del 95% de la población mundial, España ocupa el número 16 a una corta distancia de países como Costa Rica o Islandia que ocupan las primeras posiciones y lo más curioso es que año a año seguimos escalando posiciones. Yo al ver los resultados, no puedo por menos que preguntarme ¿cómo es posible esta paradoja de esta felicidad cañí en un país tan convulso tanto económicamente como políticamente hablando?
Se me ocurren varias explicaciones posibles. La más sencilla es que la propia dificultad de definir la felicidad hace que su medición sea muy complicada y las variables proxy que tratan de estimar la felicidad de los ciudadanos sean tan subjetivas que no sirvan para evaluar la felicidad de los ciudadanos. Por ejemplo, una de las variables tenidas en cuenta es la esperanza de años de vida felices, que para ser calculada se tiene en cuenta tanto los años de vida así como cual es la percepción entre los encuestados de cómo van a ser esos años. Si bien es cierto que las apreciaciones –aunque sean subjetivas- son perfectamente válidas, el número de años viene condicionado por factores naturales como la climatología del país, que es cuestión de mero azar dónde estíé situado geográficamente el país, y no parece que haya posibilidad de cambios a lo largo de los años.
Quizás, me equivoco y simplemente la felicidad de la población no tenga ninguna relación con la situación económica del país, pues sino a tenor de los últimas previsiones de empleo, crecimiento económico, díéficit público de España suministradas por diversos organismos internacionales no se entiende tanto alegría y alborozo entre nuestros paisanos. O a lo mejor la clave está simple y llanamente en que Spain is different y a pesar de que las familias y las empresas están sufriendo cada día más en esta crisis, que a medio plazo no tiene visos de remitir, los españoles están muy contentos. Es más, yo si fuera Zapatero haría uso de este tipo de encuestas y gritaría a los cuatro vientos: Sres que importa el paro registrado haya crecido este mes en otras 100.000 personas más, si somos MUY FELICES…