íngel Ron, el presidente del Popular y el más joven de la banca española, se presentó ayer como quien ha pasado un mal trago pero está convencido de tener un futuro prometedor. "El año que comienza será duro, pero no tendrá que ser peor que 2009 para quienes se hayan preparado bien para afrontar los retos. Comenzamos 2010 con los deberes hechos. Lo peor de la crisis ha quedado atrás. Toca gestionar sus efectos", concluyó.
Los inversores bursátiles creyeron el mensaje. Las acciones del Popular subieron el 5,48% y fue el valor que mejor se comportó del Ibex 35. El tercer banco registró un beneficio de 766 millones en 2009, un descenso del 27,2% tras realizar "provisiones cautelares", es decir, por lo que pueda venir, de 480 millones. Tiene la mayor morosidad de los grandes bancos, el 4,81%, y, probablemente la cobertura más ajustada: 50,27%.
Han podido provisionar mucho por las plusvalías obtenidas de la venta de inmuebles, 458 millones, y de operaciones financieras, 240 millones. Admiten que seguirá subiendo la morosidad hasta junio (algunos expertos dicen que tocará el 6%) para luego descender. Por eso Ron cuenta con tener menos provisiones, pero tambiíén harán menos plusvalías. En definitiva, algunos analistas calculan que este año el Popular ganará lo mismo que en 2009.
Ron resaltó sus fortalezas: es la entidad "con el ratio de capital más alto de España y de los mejores de Europa"; ha crecido un 4,2% en críédito y volverá a hacerlo este año robando clientes a la competencia; ha subido un 15% los depósitos para evitar problemas de liquidez; es uno de los bancos más eficientes del mundo y tiene más margen de negocio que sus competidores. En definitiva, la clave es que ha incrementado un 11% los ingresos y ha reducido un 2,2% los gastos.
En las respuestas a la prensa, rechazó la posibilidad de comprar entidades y discrepó de la afirmación de la Asociación Hipotecaria sobre la insostenible deuda de los promotores. El Popular ha comprado activos por 3.150 milones y se ha apuntado unas minusvalías de 770 millones por su participación en Metrovacesa y Colonial. Cerrará 100 oficinas más en España y pidió que se acelere la reestructuración del sector "porque la incertidumbre está perjudicando".