efe. alcorcón 15/05/11
El Betis ya es matemáticamente equipo de Primera división despuíés de la derrota del Granada con el Alcorcón. Los granadinos no podrán alcanzar a los verdiblancos ni aunque el CEDD le diese los tres puntos por alineación indebida del Barcelona B. El equipo madrileño logró la victoria gracias a un gol de penalti de Sergio Mora antes del descanso y a otro de Quini en el tiempo añadido. Los bíéticos lo celebrarán en Sevilla este domingo por la noche con toda su afición.
El Alcorcón venció al Granada, gracias a los tantos de Sergio Mora de penalti en la primera mitad, y de Quini en el tiempo de descuento, y se ha situado a cuatro puntos de los puestos que dan acceso a las eliminatorias por el ascenso. Juan Antonio Anquela, tíécnico del Alcorcón, como es habitual desde que logró la permanencia, continuó haciendo rotaciones en su once titular y saltó al campo con varias novedades respecto al último encuentro liguero.
El más sorprendente fue el de dejar a su máximo goleador, Quini, en el banquillo, y repetir la apuesta de situar al defensa Babin como organizador en el centro del campo. Esas variantes no dieron el resultado esperado al equipo local en la primera mitad, ya que a los madrileños se les vio incómodos sobre el cíésped e incapaces de mantener la posesión del balón, algo que les pudo pasar factura puesto que el Granada gozó de dos oportunidades claras de gol en los primeros diez minutos.
Esas ocasiones serían prácticamente los únicos acercamientos con peligro para los visitantes en los primeros cuarenta y cinco minutos, ya que los granadinos acusaron en exceso la baja en ataque de Geijo, y el recurso ofensivo que ofrecieron fue el de poner en punta a Ighalo, que, demasiado solo, apenas inquieto a la defensa alfarera. Los madrileños tampoco estuvieron muy acertados en ataque, y durante la primera mitad no dispararon ni una sola vez a la portería defendida por Roberto. La táctica de Anquela de poner a David Sanz como único punta no funcionó, ya que la conexión de íéste con el centro del campo fue inexistente y apenas le llegaron balones.
El partido se rompió a los 39 minutos, cuando en un balón elevado, sin aparente peligro, Nyom golpeó dentro del área con la pierna derecha en la cara a Paco Montañíés y el árbitro decretó la pena máxima. Sergio Mora, de disparo raso ajustado al palo derecho, puso por delante al Alcorcón.
Dani Benítez, al larguero
Tras la reanudación, el Granada mejoró con la salida de Orellana, que dio más velocidad al ataque de los andaluces desde el extremo izquierdo, pero hasta en tres ocasiones sus centros al corazón del área no encontraron rematador por el acierto de los defensas locales. El Alcorcón, con el marcador a favor, se limitó a ralentizar sus posesiones en el centro del campo, y dejar toda su iniciativa ofensiva a las incursiones de Fernando Sales por la banda derecha, y a la imaginación del delantero Borja, que ejerció labores de organización bajando a recoger el balón constantemente hasta la medular.
La oportunidad más clara del Granada llegó en el minuto 72 por medio de Dani Benítez, que sacó una falta desde el costado derecho, el balón fue cogiendo efecto hasta el segundo palo, y cuando el esfíérico estaba a punto de entrar en la portería, Eladio estiró una mano que mandó el balón al travesaño.
Esa sería la primera de una sucesión de oportunidades que el Granada iría encadenando hasta el final del partido, aunque la eficacia del guardameta madrileño permitió que los visitantes no consiguieran empatar. En el tiempo de descuento, Quini logró el segundo tanto del Alcorcón al anticiparse al portero Roberto y empujar un balón centrado por Montañíés desde la banda izquierda.
