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Otra semana de rigor vivió el mercado de metales entre el oro vacilante en su atractivo anticrisis y el cobre a la expectativa del comportamiento de la demanda.
Sin embargo, la crisis de deuda en la Eurozona, la posible salida de Grecia de ese grupo y el peligro de contagio fueron la causa común en las caídas de los precios de hasta mínimos en cuatro meses.
Aunque la víspera el oro registró un ligero ascenso, culminó la semana a la baja en línea con otras materias primas golpeadas por el alza del dólar ante el euro.
De tal forma, el metal precioso operó por debajo de los mil 572 dólares la onza, un aumento de uno por ciento en la sesión y un retroceso de 1,3 por ciento en la semana.
El cobre recorrió un camino similar, pues aunque cerró con una leve subida hasta los mil 654 dólares la tonelada, en los últimos siete días llegó a tocar sus menores valores desde principios de año.
Analistas pronostican que el metal industrial debe terminar mayo con su peor desempeño mensual desde octubre de 2011.
