Los fondos de inversión van a ser, en líneas generales, uno de los productos más beneficiados por el veto a los depósitos, que hasta ahora han sido el producto que más activos les ‘robaba’. Dentro de los fondos, los garantizados son el producto más parecido a las imposiciones de los bancos por la seguridad que ofrecen, y las gestoras ya han comenzado a lanzar nuevos vehículos, con rentabilidades del 3%.
En principio, ni en las entidades ni en la patronal tiene constancia de que los garantizados vayan a ser incluidos en la normativa que preparara el Banco de España sobre productos como depósitos, pagaríés o cuentas remuneradas, aunque habrá que esperar a que se concrete la nueva regulación.
De confirmarse que no están incluidos, esto supondría un filón para las gestoras, ya que muchos partícipes cambiarían los depósitos por estos productos. Además, a las firmas les basta con mantener las rentabilidades que estaban ofreciendo hasta ahora para superar las retribuciones de los depósitos.
De hecho, es lo que están haciendo. Los tres nuevos garantizados registrados en los últimos días en la CNMV ofrecen una TAE de entre el 2,9% y el 3,22%, en línea con las rentabilidades de los productos comercializados en noviembre y diciembre, con vencimiento en 2017. Unas cifras que con las nuevas recomendaciones del organismo dirigido por Luis María Linde no podrán alcanzar los depósitos –que a más de 24 meses podrán dar un 2,75% como máximo-.
Las entidades que ya han lanzado nuevos productos son Bankinter, con BK Renta Fija Titanio 2017 Garantizado, y Santander, con Santander 100 por 100 13 y Ahorro Garantizado 5. Los tres son vehículos de rendimiento fijo que invertirán tanto en deuda pública como privada.
Un año complicado
Los fondos garantizados han registrado en 2012 uno de sus años más complicados, en lo que a fuga de activos se refiere. De hecho, han experimentado reembolsos de 2.000 millones, según los datos de Ahorro Corporación, una cifra que contrasta con los 4.320 millones que captaron en 2011.
La salida de activos se agudizó, además, en la recta final del año, despuíés de que en septiembre se levantara el anterior veto a los depósitos impuesto por la entonces ministra de Economía, Elena Salgado.
Sin embargo, las rentabilidades sí acompañaron. De media, ofrecieron un retorno del 4% en el caso de los rendimientos variable, mientras que los ligados a la deuda se revalorizaron un 4,19%, según los datos de Inverco.
Vuelco al mapa del ahorro
No obstante, las recomendaciones a los depósitos han dado un vuelco al mapa del ahorro. En apenas diez días, las alternativas para los ahorradores españoles se han limitado notablemente y hoy hablar de rentabilidades cercanas al 4% es prácticamente una utopía. En el terreno de los depósitos a plazo fijo, el producto de ahorro por antonomasia en España, sus rendimientos se han visto limitados al 1,75% (a doce meses vista), 2,25% (entre uno y dos años) y 2,75% a partir de 24 meses de duración. A día de hoy sólo los bancos portugueses ofrecen una rentabidad superior al 4%. En el caso de Espirito Santo por estar vinculado al fondo de garantía portuguíés y en el caso de Finantia Sofinloc porque asume las posibles penalizaciones. El resto de bancos han recortado sus ofertas hasta dejarlas al borde del 2%.
En el caso de otros productos como las cuentas remuneradas, destaca Bankinter con su cuenta COINC al 4% e ING -otra de las entidades que no está vinculada al fondo de garantía español- con una que ofrece un depósito al 3,3% durante los cuatro primeros meses.
Por su parte, los pagaríés tambiíén han visto rebajadas sus rentabilidades, si bien no en la misma medida que los depósitos a plazo fijo. En este caso, todavía es posible encontrar rendimientos superiores al 3% en entidades nacionales como Banesto, Bankinter o Banco Sabadell
