El rebote va tomando cuerpo poco a poco y ahora la cuestión será ver si los alcistas logran imponerse de un modo más contundente. Desde EEUU lograron mantener niveles clave, aunque los avances no fueron lo suficientemente pronunciados como para lanzar las campanas al vuelo. La preocupación sobre la guerra de divisas sigue candente.
En Wall Street lo más destacable es recordar lo importante que es mantener los niveles de los 2.746 puntos en el Nasdaq 100, nivel clave para mantener abiertas las posibilidades alcistas. Esta meta se volvió a conseguir ayer, a pesar de que el indicador presentó ligeras píérdidas y cerró en los 2.763 puntos, cediendo un 0,4%.
Donde sí hubo rebote fue en Europa y el Ibex 35 llevó la voz cantante. Por tíécnico, "con el sensible movimiento alcista de ayer el mercado español se acerca al gran hueco bajista dejado en los 8.300/8.365 puntos, nivel de gran resistencia tíécnica que ofrece a los bajistas una zona en la que intentarlo nuevamente", apunta el analista Carlos Doblado. En el resto de Europa, el alza del índice europeo no tuvo su ríéplica en otros índices como el Dax alemán o el Mib italiano, que fueron incapaces de romper su primera resistencia.
Pero ha habido muchos puntos de tensión en la jornada. Y uno de los más importantes -junto con la visita de Mario Draghi a España- ha sido que el G7 ha declarado su preocupación por evitar una guerra de divisas. El grupo de los siete ha pedido a las principales economías enfocar su política monetaria a objetivos domíésticos permitiendo que el libre mercado determine el precio de las divisas.