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Autor Tema: UGT aplica la reforma laboral del PP tan criticada por el sindicato  (Leído 137 veces)

Eguzki

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Cándido Míéndez asegura que el sindicato socialista aplica esa ley laboral, que tanto critica, cuando no llega a una acuerdo con los trabajadores.

El secretario general de UGT, Cándido Míéndez, ha reconocido hoy que el sindicato socialista ha aplicado la reforma laboral del PP, una ley que ha sufrido dos huelgas generales en España con el apoyo de la propia UGT, cuando no se llega a un acuerdo con los trabajadores a despedir.

Así­, Míéndez, en declaraciones a la Cadena Ser, ha señalado que “hemos intentado llegar a acuerdos con trabajadores que estaban sujetos a programas públicos y ha habido casos en los que no hemos llegado a un acuerdo, en estos casos nos acogemos a la legislación vigente”, que no es otra que la reforma laboral del PP que contempla 20 dí­as de indeminización por año trabajado y un máximos de 12 mensualidades.

Aún así­, Míéndez asegura que “nuestra estrategia es seguir con la protesta legí­tima y democrática en la calle, defender alternativas, desmontar la mentira de ‘esto funciona o funcionará’ y la de ‘no hay alternativas’, sí­ las hay y las hemos presentado. Hay que generar un clima de compromiso con las formaciones polí­ticas para que se comprometan contra los atropellos que este gobierno está perpetrando”.

Porque esa reforma laboral, que ha servido a UGT para liberarse del excedente de personal alimentado por los años de derroche del dinero público "ha sido útil e incluso perjudicial, no es la solución”.

Y añade que “acreditamos nuestro compromiso con los jóvenes, hemos participado activamente en la discusión de la reforma laboral pero no la hemos firmado. En nuestras observaciones advertí­amos que sólo un cambio en profundidad en la polí­tica económica en España y en Europa apostando por el crecimiento económico, puede contribuir a paliar a corto plazo el empleo juvenil. Tambiíén hemos hecho hincapiíé para evitar una catástrofe social que producirí­a una generación perdida, pero esa generación se rencontrará en la recuperación económica con la sociedad, con el trabajo”.

Continúa afirmando que “nos preocupa la generación abandonada, que nadie la va a reclamar cuando venga la recuperación económica”. “A la generación abandonada hay que darles una alternativa, porque tienen el riesgo de quedarse definitivamente en la cuneta; por ello incorporamos este reivindicación”, manifiesta.

Pero íél tiene soluciones. “La solución o alternativa para la generación perdida es reconocer la figura de facto del prejubilado, buscar una formulación puente entre el trabajador en paro y la jubilación, pero los vientos soplan en dirección contraria, donde nuestro acuerdo de prejubilaciones de 2011 quiere ser recortado por el Gobierno”.

El futuro de UGT

“Tenemos congreso el 10 de abril y planteo un respetuoso silencio al asunto de la sucesión, yo tendríé que reflexionar y la organización tendrá que hacer una reflexión conmigo, los secretarios generales y los delegados de aquel congreso, para tomar una decisión”, señala el actual secretario general de UGT que lleva 16 años en el cargo.

“Nos definirí­a como un sindicato que se integra crí­ticamente en el sistema, no somos una organización insurreccional, somos una organización que queremos transformar la sociedad a travíés de las reformas sociales y laborales. Me parece interesante que la gente pregunte, lo peor que me podrí­a haber pasado es que se hubiera producido un vací­o donde nadie se pueda interesar por el papel de los sindicatos, por la estrategia sindical y esto es un elemento muy estimulante”.

“Nosotros intentamos y conseguimos hacer aquello que nos corresponde. Los datos de la UGT, en un año muy malo como el año 2012, en tíérminos de representación democrática unitaria está entorno al 38%, hemos bajado en 2 puntos que se debe a la píérdida de empleo y a la caí­da de empresas”.

“Nosotros hemos perdido afiliación a lo largo del año, en torno a 3000 afiliados al mes, pero es poco significativa ya que ha aumentado la cuota del paro y nos hemos adaptado a ellos. En aquellos que enjuician el valor de los sindicatos, la valoración es más positiva”.

Corrupción

“El estado de la nación es francamente malo, ni los datos macroeconómicos, ni los datos que afectan a las personas, como el paro, vienen a manifestar que en el año que ha transcurrido del Gobierno del PP las cosas han ido a peor. Ninguno de los problemas reales ni macroeconómicos de la sociedad española, se han resuelto. Estamos más endeudados, el paro va a los 6 millones de personas y el problema no es cómo llegamos, es que no veo a corto plazo, sino cambia radicalmente la polí­tica económica y de la UE, la solución”.

“Si el debate de la corrupción tapa el debate de mañana, seria lamentable. En relación con la corrupción lo que se deberí­a hacer, el Gobierno y los partidos polí­ticos, es depositar en la justicia el esclarecimiento de estos hechos e intentar centrarse en definir alternativas para devolver la confianza a la sociedad española en sus instituciones polí­ticas y democráticas. Tambiíén, reconozco que es muy difí­cil para el Gobierno y está afectando a la presidencia del Gobierno”.

“La corrupción lastra el crecimiento, agrava la situación, los inversores tienen en cuenta este tema a la hora de tomar una decisión. The Economist dedicaba dos páginas a la corrupción, incluso en el deporte, y esto afecta a la imagen de nuestro paí­s. Se nos tiene que reconocer por algo más que por la corrupción porque tenemos algo más que la corrupción”.

Ley de Transparencia

“Estoy de acuerdo que la Ley de Transparencia debe afectar a los sindicatos. Las cuentas de las organizaciones sindicales, en sus recursos públicos, están fiscalizadas por el Tribunal de Cuentas y por la intervención General del Estado. No hay un vací­o, recibimos visitas de la intervención, hay que agilizar los procedimientos, hay que incluir a todas las instituciones democráticas y constitucionales en la Ley de Transparencia”.

“No se puede producir una fuga hacia adelante, orillando lo que está aconteciendo. Nosotros no somos una empresa, no somos un partido polí­tico, no somos una ONG, somos un sindicato, por lo que se nos tiene que dar audiencia para aportar nuestro punto de vista a la ley”.

Rectificación del Gobierno

“Lo primero que se pone de manifiesto es que el Gobierno ha abandonado la idea de que podí­a con todo e incluso contra todos o casi todos. Se encontraban con un programa minucioso para 2011, pero no hablaba para nada del diálogo social, de la interlocución con los sindicatos y las patronales, a diferencia del programa de 2008 y de 1996. Entraron con un espí­ritu de soberbia polí­tica que ya la empiezan a abandonar y ahora están muy interesados en las organizaciones sindicales y patronales, es una primera rectificación con los interlocutores sociales”.

Arturo Fernández

“Cuando me enteríé de la noticia de Arturo Fernández dije que era una situación insostenible. Tampoco creo que deba ser una reflexión personal de íél, tambiíén la CEOE y la CEIM deberí­an hacer esa reflexión contando con el antecedente del anterior presidente. Deberí­an generar una dinámica para resolver esta situación”.

“Nosotros hemos hablado con nuestros representantes sindicales y hemos investigado esta situación y nos han dicho que el caso que tuvieron que afrontar fue en las cafeterí­as de IFEMA para evitar un ERE, lo combatimos y conseguimos que la administración laboral rechazará el ERE. Es un grupo que tiene más de 2.000 trabajadores pero con muchos centros de trabajo y la representación sindical está muy dispersa. Los representantes sindicales en empresas pequeñas se encuentran entre la presión del empresario y la incomprensión de sus propios compañeros. Debemos reforzar la dimensión de la representación sindical a travíés de la sección sindical”.

Las relaciones con la patronal

“Las relaciones con la patronal son correctas pero poco fructí­feras, tení­amos un buen acuerdo para preservar el empleo a travíés de la contención salarial, pero la patronal lo ha despreciado por una reforma laboral que ha sido un fracaso. La relación es rica y diversa con las sectoriales porque es el diálogo social”.

“Yo espero que podamos abordar un proceso de discusión para buscar alternativas para esa generación abandonada pero hay que seguir insistiendo; o cambia la polí­tica económica en España y en Europa y se apuesta por el crecimiento económico, o las vamos a seguir pasando canutas”.