El gigante de la moda gallego va a ampliar, en concreto, la capacidad de sus plataformas de distribución en Arteixo (La Coruña), Zaragoza y Lelystad, en Holanda, que trabajan para Zara; la de Tordera, en Barcelona, que opera para Bershka y la Sallent, también la capital catalana, y que se encarga de la distribución de las prendas de Stradivarius.