Las compañías privadas estadounidenses suprimieron 298.000 empleos en agosto, lo que supone el menor recorte en un año, aunque supera las previsiones y confirma que las empresas aún necesitarán más tiempo para recuperarse de la recesión, informó el martes Automatic Data Processing (ADP).
Estos datos, que no incluyen el sector agrícola ni las empresas públicas, se difunden dos días antes de que el Gobierno difunda los datos oficiales del sector y apuntan a que la destrucción de empleo privado en la primera economía mundial fue en agosto la más contenida desde septiembre de 2008.
"La píérdida de empleo está disminuyendo claramente", destacó la firma de análisis ADP, que, aún así, advirtió que "se seguirán registrando descensos durante al menos varios meses, pese a los signos de recuperación en el conjunto de la economía".
Por sectores productivos, ADP detalló que en el de servicios desaparecieron 146.000 puestos de trabajo durante el pasado agosto; mientras que en el de producción de bienes se destruyeron 152.000, de los que 74.000 eran del ámbito manufacturero y los 78.000 restantes del industrial.
Uno de los ámbitos más perjudicados en la peor recesión en Estados Unidos desde la Gran Depresión es el de la construcción, donde en agosto se empleó a 73.000 personas menos que en julio, con lo que se encadenan ya 31 meses consecutivos de destrucción neta de puestos de trabajo en este sector.
Desde que el empleo en la construcción alcanzó su máximo apogeo en Estados Unidos, en enero de 2007, un total de 1.562.000 puestos de trabajo han desaparecido.
Por lo que respecta al sector financiero, otro de los grandes afectados por la crisis crediticia y la recesión económica, las empresas estadounidenses dedicadas a esta actividad contrataron en agosto, en el mes consecutivo número 21, a menos gente que en el mes anterior y eliminaron un total de 19.000 empleos.
Los trabajadores más afectados fueron los de las compañías medianas (entre 50 y 499 empleados) y pequeñas (menos de 50), donde se eliminaron 116.000 y 122.000 empleos, respectivamente; mientras que las grandes empresas (a partir de 500 empleados) suprimieron 60.000 puestos.
ADP calcula que desde que la tasa de empleo alcanzó su mejor momento en enero de 2008 en este país, las pequeñas empresas -las que más acusan los ciclos económicos- han eliminado 2,5 millones de puestos de trabajo.
Además de difundir sus cálculos correspondientes al mes de agosto, la firma de análisis, que estudia las contrataciones de cerca de medio millón de empresas estadounidenses para compilar estos datos, tambiíén revisó a la baja la cifra de empleos destruidos en julio, que pasó de 371.000 a 360.000 puestos de trabajo.
