VíCTIMAS BURSíTILES DE LA CRISIS DE LA BOLSA ESPAí‘OLA
Acciones de compañías como Jazztel, Afirma –antigua Astroc- y Colonial han visto caer su precio entre 78 y 10 veces desde máximos. Entre las grandes tambiíén hay títulos, principalmente de la construcción, que han sufrido reducciones de más de la mitad de su precio, Sacyr-Vallehermoso, FCC o Ferrovial.
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Ahora se abre el camino a inversores atrevidos que busquen gangas entre los cadáveres que ofrecen las caídas de la bolsa.
Las caídas de las bolsas no afectan a todos los valores por igual. El rumbo de los mercados está pasando factura a muchas acciones y algunos títulos se han vuelto “insalvablesâ€. Son inversiones en las que es muy difícil que recuperen lo perdido, ya que, cuando un valor cae un 50% luego debe subir, para igualar el precio original, un 100%.
La explosión de la crisis subprime el pasado verano generó una espiral de desconfianza que ha calado de lleno en los mercados crediticios y ha dejado tocada la liquidez. Ese malestar tambiíén ha tenido su reflejo en los parquíés y desde el cuarto trimestre de 2007 los principales índices mundiales ha registrado voluminosas caídas.
Aquellos que confiaron su dinero a la renta variable y no supieron escapar en el momento adecuado, ahora lastran acciones de las que no podrán recuperar la ganancia esperada. Un ejemplo de damnificados son aquellos que apostaron por Jazztel.
Los títulos de la compañía de telefonía acumulan una caída anual en 2008 del 9,68%. No es de las que más han perdido en el año, pero quien entrara en máximos, 21,85 euros, ha visto como el precio de sus acciones ha caído 78 veces desde 2001 hasta los 28 cíéntimos a los que se intercambian en estos momentos.
Hay casos más sangrantes como la caída de Astroc, ahora conocida como Afirma. Quienes entrasen en la OPV de la inmobiliaria levantina han perdido el 63% del valor de sus acciones, pero quienes entraran en máximos han visto que el precio de los títulos de Afirma ha caído 32 veces.
Aunque habrá inversores que compraron a 6,40 euros, precio de OPV, y vendieron a 72,6 euros, máximo intradía de Afirma; lo que se traduce en una plusvalía del 1.000%. Paradojas del mundo de la Bolsa, que permite jugar con máximos y mínimos intradía que pueden traducirse en suculentas ganancias.
En esta colección de “cadáveres†de la bolsa dos nombres siempre vuelven a la cabeza de los inversores: Colonial y Vueling. El precio de la inmobiliaria ha caído 6,5 veces desde máximos, mientras que el de la aerolínea de bajo coste ha cedido 5,3 veces.
Las bajadas han sido espectaculares, tanto en tiempo como en precio, ya que Colonial ha pasado de 5,79 euros que valían sus acciones a precio actual en torno a los 0,90 euros, un 84% menos. Vueling no se queda lejos y en un año ha perdido el 80%, de los 46,7 euros que tocó a mediados de abril de 2007 hasta los 9 euros de la actualidad.
Quienes optaron por entrarar en Dogi a 17 euros y no decidieran vender a tiempo –los analistas aconsejan soltar los títulos tras perder un 10% ya que recuperar ese porcentaje es difícil- todavía estarán rasgándose las vestiduras tras caer 15 veces el precio de sus acciones hasta los 1,11 euros.
Avanzit es otra de esas acciones irrecuperables. Sólo en lo que va de año suma ya un descenso del 32,5% y desde máximos el precio de la acción ha caído 10,38 veces. Aquellos que compraron cuando su precio estaba en el punto álgido, 25,95 euros, y vendieron en mínimos, 1 euro, han perdido el 96% de su inversión.
En la actualidad, los títulos de Avanzit se encuentran en la banda de los 2,5 euros, lo que se traduce en ganancias para quienes entraron por debajo de ese precio. Por ejemplo, alguien que entró en mínimos, 1 euro, ha visto repuntar su inversión en Avanzit el 150%.
Los índices tampoco escapan a los recortes y el Ibex 35 acumula unas píérdidas en 2008 del 10%. En lo que va de año el principal selectivo ha visto como se evaporaban más de 1.500 puntos. Más preocupante es ver como desde el máximo de 15.945 puntos que registró el 8 de noviembre de 2007, al día siguiente tocó su máximo intradía en los 16.040 puntos, ha caído a niveles de 13.500, un 15% menos.
El Nasdaq es otro de esos casos paradigmáticos con el estallido de la burbuja tecnológica, que muchos comparan con la crisis de liquidez actual. El 10 de marzo de 2000 el Nasdaq cerró a 5.048 enteros. Apenas un año y medio despuíés tocaba mínimos a niveles de 1.114,11 dejándose por el camino un 78% de su valor. Hoy deambula a niveles próximos a los 2.200 puntos, un 57% menos que el máximo histórico del tecnológico.
LOS CHICHARROS, A PRECIO DE SALDO
La apuesta por los chicharros, acciones con poca liquidez y variaciones fuertes de precio, puede salirle muy cara. Ejemplos no faltan en el mercado continuo. Montebalito ha costado un 62% a sus accionistas en las últimas 52 semanas. Desde casi 28 euros los títulos de la compañía han pasado a unos 8, casi 21 euros menos.
El precio de las acciones de Tavex, grupo algodonero dedicado al Denim, ha caído 10 veces desde máximos, desde 16 a 1,6 euros. Indo ha pasado de 10,6 a 3,98 euros en menos de un año, claro ejemplo de valor irrecuperable.
Adolfo Domínguez, estandarte de la moda gallega, suma una minusvalía del 10% en lo que va de 2008. Desde los 53,3 euros que marco a finales de 2006 el valor ha caído 2,43 veces hasta los 22 euros con los que cotiza en la actualidad. Paradojas de la bolsa quienes entraran en la OPV, salió a 18,07 euros, todavía hoy han ganado el 21%.
Renta Corporación en dos años se ha convertido en una de las peores OPV´s del mercado español. En 24 meses sus acciones acumulan píérdidas del 63%. Desde los 29 euros con los que salió a cotizar al mercado ha llegado en la actualidad a los 10 euros, sólo en 2008 pierde el 31%. Otro cadáver más del mundo bursátil.
LOS VALORES DEL IBEX-35 TAMPOCO SE LIBRAN
Los activos que cotizan dentro del Ibex-35 tampoco logran zafarse de las píérdidas irrecuperables. Entre los ejemplos más aberrantes está la constructora Sacyr-Vallehermoso. Los quebraderos de cabeza con Eiffage junto a otros factores, se han traducido en una caída anual de sus títulos del 21,13%. Sus títulos llegaron a subir hasta los 54 euros, frente a los 21 en los que cotiza actualmente.
Otras constructoras de este selectivo tambiíén afrontan minusvalías. Es el caso de FCC y Ferrovial. La compañía controlada por Esther Koplowitz arrastra un descenso del anual del 13,66%. Desde un precio máximo de 83,9 euros, ahora se mueven en torno a los 44,27 euros; mientras que la presidida por Rafael del Pino ha visto reducirse a la mitad su precio desde los 82,75 euros de máximo hasta los 48 euros en los que se mueve en la actualidad.