La mejor receta para enfrentar otra posible desaceleración mundial es tener fundamentos macroeconómicos sólidos e impulsar reformas estructurales, estimó el Banco de Míéxico (Banxico).
El subgobernador del banco central, Manuel Sánchez González, expuso que una desaceleración en los próximos meses en la economía mundial, en particular en la de Estados Unidos, ''probablemente tendría algún efecto en la misma dirección en la economía mexicana''.
Entrevistado en la presentación del libro ''Temas económicos y sociales de actualidad en Míéxico'', dijo que para enfrentar en general los ciclos económicos, la mejor estrategia, ''la mejor receta'' de cualquier economía es tener sólidos sus fundamentos macroeconómicos y aprovechar las oportunidades para impulsar reformas estructurales.
''Entonces, yo diría que hay que consolidar, continuar consolidando la estabilidad de los precios y la fortaleza de las finanzas públicas y, con estos dos elementos, tener cada vez más sólido el marco macroeconómico'', insistió.
Asimismo, aprovechar todas las iniciativas positivas que existan en materia de reformas estructurales para impulsar el crecimiento de largo plazo, ''que es el que más nos debe preocupar para elevar el bienestar general de la sociedad mexicana''.
Se reservó hacer alguna estimación sobre la trayectoria de la economía mexicana este año, ya que hacer pronósticos es una labor complicada que requiere tomar en cuenta todos los elementos disponibles y ponderar riesgos.
Durante la presentación de este primer libro de la colección ''Charlas de economía en mangas de camisa'', organizadas por el Museo Interactivo de Economía (MIDE), el funcionario del Banxico hizo algunas reflexiones sobre la estabilidad de precios.
En su opinión, las autoridades de cualquier país deben dar prioridad a este objetivo, ya que los beneficios de la estabilidad de precios son tan importantes para la población que sería un error renunciar a ellos en búsqueda de alternativas.
En el caso de Míéxico, dijo, el banco central tiene la meta de inflación de 3.0 por ciento anual porque se trata de un objetivo deseable y factible.
Sánchez González estima que consolidar dicho objetivo es la mejor contribución que el Banxico, como autoridad monetaria, puede hacer para propiciar el crecimiento económico.