Las grandes constructoras españolas (ACS, Acciona, FCC, Ferrovial, OHL y Sacyr) estudiarán la "oportunidad" que supone participar en los futuros proyectos del plan de infraestructuras de 50.000 millones de dólares (unos 39.000 millones de euros) anunciado ayer por el presidente estadounidense, Barack Obama.
Así lo explicaron hoy a Efe fuentes de estas compañías, que coincidieron en que esta iniciativa es una "muy buena oportunidad" para favorecer su internacionalización y su presencia en el mercado estadounidense.
Las constructoras señalaron que "estudiarán atentamente" los distintos proyectos en los que pueda concretarse este plan, y verán cuáles son las alternativas que les ofrezcan unas mejores posibilidades de negocio.
Además, fuentes del sector explicaron que la puesta en marcha de nuevas obras por parte de las constructoras españolas en Estados Unidos repercutirá en un incremento del empleo local.
Las grandes constructoras españolas cuentan ya dentro de sus distintas áreas de negocio con varios proyectos y concesiones en el mercado estadounidense.
Así, la actividad de Acciona en Estados Unidos está centrada en gestión de agua y energías renovables, ya que la compañía opera cinco parques eólicos y una planta termosolar en Nevada, así como fábricas de turbinas en Iowa y una desaladora en Tampa (Florida).
Fuentes del grupo indicaron que el plan de Obama puede ser una oportunidad para extenderse al negocio de infraestructuras, en el que Acciona ya está presente en Míéxico y Canadá.
Asimismo, Ferrovial señaló que esperará a "ver cómo se sustancian" los nuevos proyectos, al tiempo que resaltó la "fuerte presencia" que tiene en Estados Unidos en concesiones de infraestructuras, puesto que cuenta con cinco autopistas en construcción o explotación, por un importe total de 9.800 millones de dólares (unos 7.700 millones de euros).
En cuanto a FCC, está presente en el mercado estadounidense desde 1984, con negocios de cemento, gestión de mobiliario urbano y otros servicios, mientras que entre los proyectos más destacados de OHL se encuentra la ampliación del metro de Miami.
Por lo que respecta a ACS, se encarga de las obras del metro de Nueva York y gestiona tres autopistas y tiene varias instalaciones eólicas y termosolares.
Por su parte, fuentes de Sacyr Vallehermoso aseguraron que "cualquier iniciativa" por parte del Gobierno español que favorezca a las constructoras "será bien recibida".
A su vez, fuentes de la Confederación Nacional de la Construcción (CNC) recalcaron en declaraciones a Efe que el mercado estadounidense es "muy duro para las empresas españolas", ya que tiende a proteger a sus propias compañías, por lo que pidieron el "apoyo" del Gobierno español al sector.
Esta ayuda podría concretarse tanto en evitar penalizar fiscalmente el retorno de beneficios como en bonificar el IRPF de los trabajadores o tíécnicos que pudieran trasladarse a EEUU en caso de una eventual participación española en los planes.
La CNC resaltó además la "vocación exportadora" de las empresas españolas más sólidas del sector de la construcción, por lo que consideran "buena" cualquier posible ampliación del mercado en el que se pueda competir.
Por su parte, el presidente de la Asociación Nacional de Constructoras Independientes (ANCI), Jaime Lamo de Espinosa, recalcó que la receta de Obama es la que usó su antecesor Franklin D. Roosevelt cuando ante la crisis de 1929 apostó por la obra civil y los programas de inversión en el marco del New Deal.
"Y me parece que esa fórmula es la adecuada para España cuyo PIB crece a ritmo mucho menor, flaqueante, que el de EEUU", añadió Lamo de Espinosa, para quien en los próximos Presupuestos Generales del Estado "hay que recortar gasto no productivo a otros ministerios y llevar esas partidas a los ministerios inversores".
