El metal para entrega en febrero terminó a 1,384.90 dólares la onza en Estados Unidos.
El oro cayó despuíés de que China elevara sus requerimientos de reservas para los bancos, mientras que inversores tomaron ganancias tras sólidos datos que mostraron que el díéficit comercial en Estados Unidos se redujo y la confianza del consumidor aumentó.
Para la semana, el lingote perdió más de un 2%, su mayor declive semanal en casi dos meses, porque los inversores tomaron ganancias en el metal precioso y destinaron algunos fondos a bonos del Gobierno.
Suki Cooper, analista de metales preciosos de Barclays Capital, dijo que la toma de ganancias presionó al oro pero que la incertidumbre económica mantuvo estable la demanda de inversión a largo plazo.
El oro al contado retrocedió 0.1% a 1,385.92 dólares la onza a las 1910 GMT, muy por debajo de un máximo de 1,430.95 dólares tocado el martes. Los futuros de oro estadounidenses para febrero bajaron 7.90 dólares, a 1,384.90 dólares.
La plata al contado cedió un 0.2%, a 28.65 dólares la onza, tras escalar a 30.68 dólares el martes. Más temprano, el banco central de China anunció que elevará sus requerimientos de reservas para los bancos en 50 puntos básicos, a partir del 20 de diciembre, una medida con la que busca retirar la liquidez excesiva en la economía y contener la inflación.