Mes y medio. Ese es el plazo que tiene General de Alquiler de Maquinaria (GAM) para pagar una deuda de 475 millones de euros o conseguir un nuevo aplazamiento por parte de los acreedores para evitar el concurso de acreedores. La compañía, participada por numerosas cajas y varias firmas de capital riesgo, ha conseguido que la banca no le ejecute hasta el 31 de diciembre.
GAM ha firmado un contrato por el cual suspende el repago del príéstamo principal que la empresa auxiliar de la construcción adeuda a trece entidades financieras. Es lo que se conoce como “standstillâ€, un vocablo financiero que recientemente utilizó Uralita para evitar tambiíén un impago de 150 millones con unos bonistas estadounidenses.
La empresa asturiana, que en su día llegó a valer más de 1.000 millones en bolsa -hoy capitaliza apenas 25-, ha conseguido además que los acreedores le concedan una línea adicional de liquidez de cinco millones de euros para hacer frente a sus pagos más inmediatos. La compañía entiende que esta ayuda es “un paso muy importante previo a la firma del acuerdo definitivo de reestructuración de la deudaâ€.
Para evitar la suspensión de pagos, GAM se ha puesto en manos de dos expertos en refinanciaciones, Houlihan Lokey y Pricewaterhouse. Ambas han convencido última hora a BBK, uno de los accionistas de cabecera, para que diera su visto a la nueva asistencia financiera tras haber mostrado su disconformidad. En el núcleo duro de GAM se encuentran Liberbank, Banca Cívica, Novagalicia Banco, N+1 y Gonzalo Hinojosa, expresidente de Cortefiel. Además, en el proceso tambiíén están participando Cuatrecasas y Uría y Meníéndez.
El objetivo prioritario para los asesores es conseguir que la banca acreedora conceda a GAM un nuevo aplazamiento de su deuda, que asciende a unos 475 millones de euros. Pero el grave problema es que la empresa de maquinaria industrial ya ha pactado dos refinanciaciones –la primera en 2009 y la última el pasado 1 de febrero- y ha incumplido sus obligaciones de forma reiterada.
Pese a haber salvado un match ball, a GAM aún le queda por convencer al 20% de sus acreedores, ya que los que han firmado la extensión del vencimiento representan solo el 80% de la deuda
