El Gobierno de Venezuela acordó asociarse con la empresa mexicana Gruma, el mayor fabricante mundial de harina de maíz, para crear dos empresas, lo que pone fin a las intenciones venezolanas de nacionalizar a una filial de esa compañía, informó hoy la Presidencia de Míéxico.
El anuncio se hizo en el marco de una reunión que sostuvieron el viernes los presidentes de Míéxico, Felipe Calderón, y Venezuela, Hugo Chávez, indicó la dependencia en un comunicado.
La empresa y el Gobierno venezolano se asociarán para la conformación de una empresa "dedicada a la producción y comercialización de harina de maíz precocida y arroz empacado", y otra "a la producción y comercialización de harina de trigo, pastas, avena, entre otros", destacó el Ejecutivo mexicano.
La institución no precisó cómo se repartirán el Gobierno venezolano y Gruma el control accionarial de las nuevas empresas.
La creación de las dos compañías servirá para "el abasto de alimentos en el mercado venezolano y beneficiará directamente a los consumidores del país andino", sostuvo la Presidencia.
El mandatario mexicano afirmó durante su encuentro con Chávez que "estas acciones realizadas por el Gobierno venezolano contribuirán a una mayor certidumbre jurídica que favorecerá a que las empresas mexicanas renueven su interíés en realizar negocios con Venezuela".
Venezuela evaluaba desde julio de 2010 la propuesta de Gruma de crear una empresa mixta para evitar la expropiación total de las operaciones de su filial Monaca en territorio venezolano.
Las autoridades venezolanas habían ordenado en mayo del año pasado la nacionalización de Monaca, una productora de harina de trigo, harina de maíz, pasta de arroz, aceite y avena, entre otros productos alimenticios considerados básicos.
Esa empresa cuenta en Venezuela con seis plantas de producción, y estaba controlada por Gruma con 72,86 % de las acciones, mientras que el 24,14 % pertenecía al banquero venezolano Ricardo Fernández.
Chávez argumentó en su momento que la expropiación de Monaca era necesaria para combatir la "escasez" y para "bajar" los costos de los alimentos básicos.
El anuncio se produce despuíés de que el pasado 1 de diciembre otra empresa mexicana, la cementera Cemex, llegara a un acuerdo con el Gobierno venezolano para que las autoridades de ese país le paguen 600 millones de dólares por el 75,7 % de su filial en Venezuela, tras un políémico proceso de nacionalización.
Adicionalmente, el convenio contempla la cancelación de 154 millones de dólares en cuentas por pagar de subsidiarias de la empresa a Cemex Venezuela.
"Calderón reconoció al Presidente Chávez por su gestión para lograr una solución definitiva a las problemáticas que venían enfrentando Cemex y Gruma en Venezuela", concluye la nota