La selección española de baloncesto sumó su síéptima victoria consecutiva en la gira de preparación para los Juegos Olímpicos, al vencer por 107-57 a Letonia en el pabellón 'Ciutat de Castelló' tras hacer gala del poderío al que acostumbra.
El equipo letón tuvo que claudicar a las primeras de cambio ante el ritmo impuesto por los españoles ya que, pese a anotar un triple en los primeros instantes que hacía que España fuera cayendo momentáneamente y, tambiíén por única vez en el partido, la velocidad impuesta por los de Aíto García Reneses le desarboló.
Tan solo en los primeros minutos del primer cuarto fue rival el cuadro visitante, que se mantenía en el partido gracias a los lanzamientos anotados desde el exterior de la línea de 6,25 metros. Pau Gasol, Garbajosa y Rudy Fernández iniciaron la escapada en el marcador que permitía que España se fuera al final del primer cuarto con el resultado favorable de 27-15.
El transcurso de la segunda mitad estuvo dominado por los españoles, que vieron como emergía aún más la figura de Pau Gasol, e incluso, se permitían el lujo de levantar de los asientos a la afición castellonense que acudió al pabellón con los lanzamientos y pases imposibles que hacían que los letones no tuvieran respiro y no supieran por donde achicar el continuo golpeo al que le sometían los de Aíto. A falta de tres minutos para el descanso el partido tuvo que detenerse momentáneamente durante unos 10 minutos debido a un apagón en el pabellón.
Los últimos minutos del segundo cuarto fueron puro espectáculo ofrecido por los vigentes campeones del mundo, poniendo la guinda del brillante espectáculo Rudy Fernandez con una canasta imposible sobre la bocina. Llegó el descanso y España vencía por 55-25, treinta puntos de diferencia y una Letonia que solamente pudo anotar diez puntos en el segundo cuarto.
El tercer cuarto continuó con la misma tónica que llevaba el partido, una España fíérrea en defensa y que salía rápidamente en busca de la canasta contraria. Letonia no sabía como frenar las acometidas españolas y el público disfrutó y se levantó de sus asientos con cada jugada que protagonizaba el equipo dirigido por Aíto.
Una y otra vez España intentaba el tiro exterior y encontraba en todo momento el buen camino, con el liderazgo de Calderón y el acierto de todos sus especialistas. Tambiíén Ricky Rubio se quiso sumar a la fiesta anotando dos lanzamientos de tres puntos consecutivos y llevando la manija del equipo en la elaboración del juego.
La selección letona no podía hacer nada más que mirar el espectáculo que estaban ofreciendo los españoles a los 5.263 espectadores que abarrotaron el pabellón, y que vieron como en el tercer cuarto la diferencia continuaba en aumento hasta situarse en los cuarenta y seis puntos al final del tercer tiempo, al que se llegaba con el marcador de 87-41 favorable a España.
El recital no acabó ahí, la afición quería y pedía más espectáculo y la selección se lo ofreció, con un final de partido espectacular. España sobrepasó la frontera del centenar de puntos venciendo y arrollando a la selección de Letonia.
