Bloomberg
Tras cuatro años de sequía, más empresas buscan reciclar el agua o venderla a productores rurales mientras la industria atiende nuevas regulaciones y demandas sobre el medio ambiente.
La sequía en California lleva a las grandes petroleras a tratar de solucionar un problema que persiste desde hace díécadas: quíé hacer con los miles de millones de galones de agua de desecho que salen de los pozos todos los años.
Las compañías perforadoras del Estado Dorado han devuelto buena parte de ese líquido al suelo en pozos de residuos. Ahora, luego de cuatro años de sequía, más empresas buscan reciclar el agua o venderla a productores rurales conforme la industria trata de adelantarse a nuevas regulaciones y demandas relacionadas con el medio ambiente.
La tendencia podría tener implicaciones para los campos petrolíferos de todo el país. Mientras la fracturación hidráulica aumenta la necesidad de agua de la industria, las empresas han entrado en conflictos desde Texas hasta Colorado y Pensilvania. California podría ser una incubadora de esfuerzos conservacionistas que hasta ahora no han despertado entusiasmo en otros lugares de los Estados Unidos.
Las compañías perforadoras tienen pocas opciones. Los 50 mil pozos de desechos del estado concitan mayor atención este año, luego de que organismos reguladores dijeran que habían permitido por error que las empresas inyectaran agua de desecho cerca de reservas subterráneas de agua bebible. Grupos de defensa del medio ambiente demandaron al estado y exigieron que ponga fin a la práctica en dos mil 500 sitios considerados más sensibles.
Una victoria de los ambientalistas podría elevar los precios de los desechos y retrasar la perforación durante meses en el caso de Chevron Corp., Linn Energy LLC y otras compañías, según un informe del 12 de junio de los analistas de Bloomberg Intelligence Brandon Barnes y Matthew Kerner.
AVANCE DE LA CONSERVACIí“N
La conservación “de pronto ha pasado a un primer planoâ€, dijo Laura Capper, fundadora de CAP Resources, que tiene sede en Houston y asesora a la industria sobre el uso del agua. “Hay toda una serie de programas. Los que aún no están reciclando se irán adaptandoâ€.
Sarah Nordin, una portavoz de Linn, no contestó de inmediato los mensajes en que se le solicitaban declaraciones sobre la demanda. Cam Van Ast, un vocero de Chevron, se negó a hablar del tema.
En San Joaquin Valley, en la zona central de California, Chevron envió el año pasado unos 30 mil millones de litros (casi ocho mil millones de galones) de aguas de desechos tratadas a productores de almendras y pistachos. California Resources Corp., el mayor productor de petróleo del estado, planea cuadruplicar la cantidad de agua que vende a los agricultores, dijo a inversores el máximo responsable ejecutivo, Todd Stevens, en una conferencia en abril.
Un grupo de defensa del medio ambiente, Water Defense, cuestionó si las ventas de Chevron a productores agrícolas no creaban un riesgo de contaminación química de la cadena alimenticia. La comisión de control de calidad del agua local dispuso que la compañía realizara análisis, y Chevron dice que ha cumplido con todas las pautas relacionadas con la contaminación.