Por... Juan Carlos González
Si os digo Betamax, seguro que todos pensáis en un formato muy viejo de almacenamiento. Fue el perdedor de la lucha contra el VHS pero sus creadores, Sony, decidieron seguir manteniíéndolo vivo a pesar de que esta guerra de formatos comenzara hace más de treinta años. Los japoneses han decidido por fin desconectarlos del todo y anuncian su muerte definitiva.
A día de hoy es difícil encontrar cintas de Betamax en tiendas aunque gracias al comunicado oficial de Sony hemos descubierto que en Japón todavía tiene un pequeño mercado y que en tiendas online como Amazon es fácil comprar cintas, lectores e incluso kits de limpieza. Corred si estáis interesados en alguno de estos productos porque la venta oficial se acabará el próximo mes de marzo en 2016.
El último producto de Betamax hecho por Sony data de 2002 cuando anunció una grabadora. Desde entonces, y más allá me atrevería a decir, es un formato muerto cuyo recuerdo está en la nostalgia de quienes tienen ya unos cuantos años. Yo sin ir más lejos no viví esa guerra y lleguíé a este mundo cuando el VHS ya se había declarado vencedor.
Entre los productos que podíéis adquirir hasta el mes de marzo teníéis cassettes como el EL-500B, 2L-500MHGB y 2L-750MHGB con el kit de limpieza L-25CLP. En MIcroMV teníéis la MGR60 y MGRCLD para limpiarlas. Lo sorprendente de esta noticia no ha sido tanto el cierre de Betamax sino el hecho de que siguiera vivo todavía.
Sony, una historia de fracasos con los formatos
La derrota de Betamax no fue baladí en Sony. Aquella victoria fue para el VHS de JVC pero esa no fue la única batalla que perdieron los japoneses. Su historial de formatos de almacenamiento fracasados es amplia. Ellos siempre apostaron por la innovación y por tener algo diferente a la competencia. A veces incluso con mejores calidades que las que se terminaron imponiendo.
Betamax fue el primero y data de 1975 pero la lista continúa: las cintas de audio digital de mediados de los ochenta no tuvieron mejor suerte y murieron años más tarde mientras que el CD se hizo con el trono. Sony se lo cargó en 2005.
Pasamos a 1993 cuando Sony anunció Minidisc. Un formato muy atractivo en tamaño que buscaba ser un estándar en la grabación de música digital. Los precios elevados y la introducción del DRM hicieron que no se impusieran. Los reproductores eran caros y al final terminaron imponiíéndose formatos más asequibles y flexibles en la grabación.
Memor Stick
MemoryStick, 1998. Sony quería alzarse victoriosa en la batalla por ser el formato estrella en las incipientes memorias digitales de pequeño tamaño. Esta guerra fue muy cruenta y duró muchos años. Tras varios intentos e intentando escudarse en la consola portátil PSP y PS Vita terminó fracasando. Los japoneses, eso sí, todavía no las han matado ya que Vita las sigue usando como sistema de almacenamiento extraíble. Tiempo al tiempo.
La PSP fue una consola para experimentar en Sony. Además de la Memory Stick apostaron por UMD, un disco óptico con carcasa que recordaba en tamaño al fallido Minidisc. En íél además de juegos se grabaron películas para verlas desde la portátil de los japoneses. Era un formato grande para la íépoca ya que en 2005 había soluciones de menor tamaño y misma capacidad. Fue un desastre y una gran lástima para los jugones que recordamos con cariño las partidas que echábamos en esta consola.