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La credibilidad del Banco Central Europeo (BCE) está en juego nuevamente si fracasa en llevar la inflación dentro de su meta.
El miembro del consejo ejecutivo del BCE, Peter Praet, añadió este jueves en Fráncfort, que podría arriesgar su instancia a perder la capacidad de influir en las conductas de familias y mercados.
Con las expectativas inflacionarias aún por debajo de la meta de casi el dos por ciento, el banco central regional ya indicó que podría llevar más tiempo lograr ese objetivo.
Los comentarios de Praet destacan por quíé el BCE elevó la proyección de más políticas de alivio en diciembre.
La entidad debe marcar su capacidad de acción dado que la presión en los precios aún es díébil y las proyecciones de inflación a largo plazo corren el riesgo de desatarse, dijo el economista jefe en una conferencia.
El BCE decidirá el 3 de diciembre si recorta las tasas o expande su programa de compra de bonos soberanos de 60 mil millones de euros por mes.
