Europa Press
Madrid.- El índice de Precios al Consumo (IPC) bajó en julio nueve díécimas respecto al mes anterior y un 1,4% frente a julio de 2008. La crisis, la temporada de rebajas y el desplome del precio del petróleo en el último año apuntan como razones de esta caída.
Por su parte, la inflación subyacente, que excluye los precios de los productos energíéticos y alimentos no elaborados, aumentó en julio un 0,6% respecto a junio, dos díécimas inferior al incremento del mismo mes, mientras que el Indicador de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) alcanzó el -1,4% interanual, cuatro díécimas menos que en el mes anterior.
Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la inflación interanual alcanzó en julio un nuevo mínimo histórico, tras encadenar su duodíécimo descenso consecutivo. En concreto, desde 1961, año en el que se inicia la serie histórica del IPC, nunca se había experimentado una tasa interanual tan negativa de crecimiento de los precios.
Precisamente, los precios tocaron 'techo' en el mes de julio de 2008, con un IPC del 5,3%. A partir de entonces, la inflación comenzó a descender, entrando en negativo en el mes de marzo de este año.
No obstante, en julio de 2008 el barril de petróleo alcanzó el mayor precio de su historia, 147 dólares la unidad, y desde entonces comenzó su declive hasta rondar los 60 dólares actuales.
Temor a la deflación
El Fondo Monetario Internacional (FMI) considera que hay deflación cuando los precios decrecen durante dos trimestres consecutivos, con lo que sólo faltaría un mes en negativo para que tíécnicamente pudiera hablarse de deflación.
En total, desde julio de 2008 hasta julio de 2009, el IPC se ha reducido casi siete puntos, aunque, de momento, el Gobierno ha descartado una situación de deflación, pues entiende que para eso debería producirse un descenso generalizado y permanente de los precios.
La clave será la evolución de los precios tras el verano, pues el precio del petróleo comenzará a igualarse respecto a hace un año.
La vivienda protagoniza las caídas
Entre los grupos que más han influido en la caída de los precios está la vivienda, que registra la primera tasa anual negativa de su historia al caer un –0,8% respecto a julio del pasado año.
"Este descenso se debe en su mayor parte a que la subida de los precios de la electricidad fue mayor en julio de 2008" y que las bajadas de los precios del gas y el gasóleo para calefacción "han sido más acusadas este año que el anterior".
Otro grupo ha sido Transporte, que cayó un –9,5% interanual, debido a la estabilidad de los precios de los carburantes y lubricantes y la disminución de los precios de los automóviles.
Alimentos y bebidas no alcohólicas, que registra una tasa anual del –2,1%, refleja su mayor caída desde el comienzo de la serie en enero de 1994 por elementos como las frutas frescas y la leche.
Otro es vestido y calzado, cuya tasa anual se sitúa en el –2,1%, seis díécimas menor que la de junio, debido a que las bajadas de precios han sido más pronunciadas en 2009.
Respecto a hoteles, cafíés y restaurantes, su tasa anual disminuye tres díécimas hasta situarse en el 1,5%. Esta variación se explica porque las subidas de precios de todos sus componentes han sido menores que en julio de 2008. Cabe destacar la tasa anual de los restaurantes, bares y cafeterías (1,7%) es la más baja desde agosto de 1986.
Respecto al aumento de precios, el más destacado es el de bebidas alcohólicas y tabaco, cuya tasa anual se sitúa en el 13%, casi cinco puntos por encima de la del mes pasado, a causa del aumento de los precios del tabaco.