Las elevadas necesidades de financiación del Tesoro español, como consecuencia del díéficit ocasionado por la actual crisis económica, han llevado las rentabilidades de la deuda pública a mínimos históricos. En la subasta celebrada ayer, sin embargo, el Tesoro elevó el rendimiento de las letras por primera vez desde junio, si bien hasta entonces habían encadenado sucesivos recortes desde finales de 2008. Subió el tipo de interíés de las letras a tres meses en 0,129 puntos, hasta situarlo en el 0,489%, mientras que el de las letras a seis meses aumentó en 0,22 puntos, hasta el 0,67%.
Con este movimiento, el mercado anticipa el posible cambio de ciclo en los tipos de interíés, ya que se espera que el Banco Central Europeo (BCE) díé un giro a su política monetaria, actualmente en el 1%, durante el próximo año. Las expectativas, no obstante, apuntan a que la subida del precio oficial del dinero se llevará a cabo antes en Estados Unidos que en Europa.
Las letras a tres meses marcaron su mínimo histórico en la anterior subasta, que tuvo lugar en el mes de septiembre, en el 0,36%, mientras que la rentabilidad más baja a seis meses se fijó en el 0,45%. La rentabilidad de las letras a un año se encuentra en el 0,73%.
Elevada demanda
La demanda de títulos públicos sigue siendo muy elevada, sobre todo en el caso de la deuda a más corto plazo. En la subasta de ayer, los inversores solicitaron letras a tres meses por un importe de 8.487,34 millones de euros, de los que el Tesoro adjudicó sólo 2.000 millones de euros.
En letras a seis meses el Tesoro emitió 4.457,06 millones de euros, de los 5.697,06 millones que pidieron los inversores.
Este jueves el Tesoro celebra subasta de obligaciones a 10 años y la extraordinaria de bonos con vencimiento el 31 de enero de 2015.
Entre ambas, el Tesoro espera colocar un volumen de 3.000 millones de euros, aunque se ha marcado como máximo 4.000 millones de euros.
