En las actas de la última reunión del Banco de Inglaterra, el organismo comenta que la caída del consumo y la inversión se está estabilizando. Dicen que existen incertidumbres excepcionales sobre el IPC y que es todavía probable que el impacto de las medidas de quantitative easing se sientan con retraso. Los miembros votaron unánimamente por mantener los tipos de interíés y el plan de compras de activos.
La libra ha reaccionado con moderadas caídas ante estos comentarios y ahora cede un 0,02% frente al euro y un 0,09% respecto al dólar.