La banca acreedora y SOS han alcanzado un principio de acuerdo para abonar el pago de la deuda, que se eleva a 1.300 millones de euros.
El pacto, que se hará público en los próximos días, según han confirmado fuentes financieras, obligará a SOS a atender sus príéstamos en un plazo de seis años, frente a los ocho que ofrecía en un principio la compañía.
Uno de los problemas en la negociación ha sido la falta de acuerdo sobre el plan de desinversiones, que a la banca, en principio, no le satisfizó del todo. SOS se ha comprometido a desprenderse de todo lo que no sea aceite, incluida su división de arroz, sus salsas y vinagres, los olivares en Portugal e incluso sus fábricas.