Se dice que la Piedra Filosofal tiene la propiedad de transformar todas las impurezas de la Naturaleza.
Generalmente se cree que la Piedra sólo puede servir, según los alquimistas, para transformar al plomo o al mercurio en oro. Este es un error. La teoría alquímica deriva de fuentes demasiado especulativas como para localizar de esta manera sus efectos. Puesto que la evolución es una de las grandes leyes de la Naturaleza, tal como el Hermetismo lo enseña hace muchos años, la Piedra Filosofal hace evolucionar rápidamente aquello que las formas naturales tardan largos años en producir y, por esta razón, los adeptos dicen que ella actúa tanto sobre los reinos vegetal y animal como sobre el mineral, y bien se la puede denominar medicina de los tres reinos.
La Piedra Filosofal es roja. Este polvo rojo posee tres virtudes:
1. Transforma en oro el mercurio o el plomo. ( En oro, no “en un metalâ€
2 Constituye un eníérgico depurativo de la sangre y, cuando se la ingiere, cura cualquier enfermedad y mantiene la juventud.
3. Tambiíén actúa sobre las plantas, y las hace crecer, madurar y dar frutos en unas horas.
Estos tres puntos parecerán muy fabulosos a muchas personas, pero todos los alquimistas se hallan de acuerdo en esto.
Además, basta reflexionar para advertir que estas tres propiedades constituyen una sola: fortalecimiento de la vitalidad.
La Piedra Filosofal es pues, sencillamente, energía Vital condensada 3 en una pequeña cantidad de materia. Actúa sobre el cuerpo con el que toma contacto. Es suficiente un poco de Piedra Filosofal para hacer crecer la vida contenida en cualquier materia, ya sea mineral, vegetal o animal. Por esta razón, los alquimistas denominan a su Piedra: medicina de los tres reinos.