El regulador de los mercados ha emitido un nuevo comunicado en el que explica que las participaciones sociales que está ofreciendo Nueva Rumasa sobre una operación de ampliación de capital de Clesa, mediante una nueva campaña publicitaria, no son negociables dentro del mercado de valores.
Nueva Rumasa busca con esta campaña publicitaria elevar el capital social de Clesa S.L. en una operación con las que pretende emitir cuatro millones de nuevas participaciones preferentes. El grupo empresarial propiedad de la familia Ruiz Mateos ofrece a los futuros inversores la posibilidad de convertirse en socios de Clesa mediante una suscripción mínima de 3.300 euros.
La Comisión Nacional del Mercado de Valores explica en la nota que al tratarse Clesa de una sociedad de responsabilidad limitada, sus participaciones no pueden ser consideradas como valores negociables o instrumentos financieros.
No se trata de una OPV
La Comisión Nacional del Mercado de Valores explica en la nota que al tratarse Clesa de una sociedad de responsabilidad limitada, sus participaciones no pueden ser consideradas como valores negociables o instrumentos financieros. De íésta forma, el regulador explica que la operación publicitada por Nueva Rumasa no es una oferta pública de venta (opv) o una suscripción de valores, operaciones ambas reguladas por la Ley 24/1988 del Mercado de Valores, que exige la publicación de un folleto informativo precio y la comercialización de estas participaciones a travíés de los intermediarios financieros, que están regulados por la CNMV.
No es la primera vez que el organismo dirigido por Julio Segura avisa a los inversores sobre las participaciones emitidas por Nueva Rumasa. Cada vez que la compañía de la familia Ruiz Mateos lanza una nueva campaña para captar liquidez el organismo regulador emite un comunicado en el que detalla en que consiste la operación y los posibles riesgos de los inversores.