La crisis en España aún no ha terminado y no muestra signos evidentes de hacerlo durante este 2011. Así lo asegura un estudio de la firma de análisis económico Freemarket Corporate Intelligence, dirigida por Lorenzo Bernaldo de Quirós, donde se apunta que “los mercados no desconfían de España, sino de la capacidad de su gobierno de adoptar las medidas necesarias para estabilizar la economía y relanzar la actividad productivaâ€.
El informe apunta que la economía española ha presentado un perfil cíclico en forma de ‘L con cola de caballo’ que implica un fuerte descenso de la actividad, un estancamiento del PIB a continuación y probabilidades considerables de recaída. En relación a sus previsiones para el año 2011, la firma especifica que "no sólo se sitúan muy por debajo del crecimiento potencial de la economía española, sino que existe el riesgo de una abrupta interrupción de la recuperación iniciada en el tercer trimestre de 2010â€.
En este sentido, Freemarket determina dos escenarios hipotíéticos para España en el caso de que se produzcan los siguientes acontecimientos: una subida de tipos por parte del BCE -establecida en el estudio en 50 puntos básicos- y la consolidación del precio del crudo en los 112 dólares por barril. En primero de los escenarios, el de Recuperación Suave (ERS), la firma estima un incremento del PIB del 0,4% para 2011. En el segundo, de Recaída en la Recesión (ERR) y más endurecido, establece un descenso del crecimiento económico del 0,1%.
De este modo, el estudio ofrece una visión sustancialmente bajista respecto al consenso establecido por los organismos oficiales en su previsión de crecimiento para el año vigente .
En su análisis del comportamiento de los distintos actores de la economía ante la crisis, Freemarket tilda de ejemplar la actitud mostrada por el sector privado -familias y empresas-, por la reducción de su endeudamiento y al incremento experimentado por su tasa de ahorro, y califica de "racional" su capacidad de respuesta. Sin embargo, señala que existen una serie de problemas estructurales que no se han corregido debido a la ausencia de una política económica orientada a afrontarlos.
En este sentido, el estudio pone íénfasis en que los incentivos ofrecidos a familias, empresas e inversores internacionales por parte del Gobierno han sido escasos para hacer frente a la situación recesiva. Por otro lado, incide en las limitaciones que presenta su ajuste fiscal y presupuestario, la ineficacia de sus planes para solventar los problemas del sistema financiero -que no han logrado sanearlo ni reestructurarlo- y las dificultades que plantean las necesidades de capitalización definidas por el Banco de España.
El informe, asimismo, muestra su preocupación por la "brutal destrucción" de puestos de trabajo que se ha registrado durante la crisis y la incapacidad que ha demostrado el país para generar empleo. De acuerdo a los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la tasa de paro ha pasado de situarse en el 8,3% en 2007 al 20,1% en 2010.
El miedo a la deuda soberana
Freemarket determina que el riesgo de una nueva oleada de crisis de deuda en la Eurozona tambiíén podría empeorar las perspectivas de crecimiento. Los rescates de Grecia e Irlanda no han zanjado las dudas sobre la solvencia de estos países y la incertidumbre sobre la necesidad de un posible rescate permanece tambiíén sobre Portugal. El país luso se situó en zona de riesgo despuíés de que Moody's rebajara la semana pasada su calificación en dos niveles hasta 'A3' y mantuviera sus bonos en perspectiva negativa.
Moody's tambiíén rebajó el pasado 10 de marzo el rating de España desde 'Aa1' hasta 'Aa2', horas antes de que se produjera el anuncio de las necesidades de capital del sistema financiero por parte del Banco de España. La agencia de calificación apuntó que el coste de la reestructuración iba a costar más de lo señalado por el supervisor y se mostró preocupada por la capacidad del Ejecutivo para conseguir una mejora estructural de las finanzas públicas, teniendo en cuenta que se espera un crecimiento económico moderado del país a corto-medio plazo.
El agujero oculto de las Comunidades Autónomas
La rebaja de la calificación de España por parte de Moody's tambiíén vino motivada por la limitación de la Administración Central para controlar el gasto de las comunidades autónomas, un aspecto que Freemarket Corporate Intelligence remarca como uno de los handicap del país para la recuperación económica. De este modo, la firma de análisis económico señala que no debe obviarse el "oculto 'agujero' autonómico".
El informe especifica que el incremento del díéficit público entre 2007 y 2009 fue de trece puntos porcentuales del PIB lo que supone un aumento de 137.000 millones de euros en el balance negativo.
En suma a los datos recogidos en la tabla, las cifras referentes al año 2010 presentaron una mejora del díéficit público total, que supuso un 9,2% del PIB tras cerrar en 92.227 millones. Sin embargo, mientras la Administración Central redujo su díéficit casi a la mitad -hasta el 4,97% del PIB con 52.798 millones-, las comunidades autónomas registraron un cierre del año con un saldo negativo de 35.997 millones, el equivalente al 3,39% del PIB frente al 2% en el que concluyó 2009.
Por otra parte, el estudio de Freemarket especifica que la deuda total de las Administraciones Públicas ha crecido un 60% desde 2007 hasta el tercer trimestre de 2010, siendo el de la Administración Central un 45%, el de las Comunidades Autónomas un 80% y el de las Corporaciones Locales un 21%. El informe subraya que "el sistema de financiación autonómica y local está en una crisis de solvencia sin retorno".