Los valores bancarios franceses protagonizan hoy las mayores caídas del Cac 40, afectados por los renovados temores de la extensión de la crisis de deuda de Italia, un país al que las entidades galas están fuertemente expuestas.
En concreto, BNP Paribas y Críédit Agricole son especialmente vulnerables al país transalpino debido a sus filiales Banca Nazionale del Lavoro y Cariparma. De acuerdo con las cifras del Banco Internacional de Pagos (BIS), los bancos franceses tienen una exposición de 410.000 millones de euros a Italia, seguidos por los alemanes con 165.000 millones.
En la Bolsa de París, BNP Paribas, Sociíétíé Gíéníérale y Críédit Agricole caen en estos momentos un 12,30%, un 15,93% y un 15,76% respectivamente; mientras que en el Stoxx600 el sector bancario europeo cotiza con un descenso del 7,69% hasta los 136,77 puntos. Mientras, las Bolsas europeas se dejan cerca de un 5% de media y, en concreto, el Ibex35 pierde un 5,30%, hasta los 7.977 puntos.
Por otro lado, en la Bolsa de Milán, los títulos de Intesa Sanpaolo y UniCredit bajan un 4% y un 3,5%, respectivamente, debido a los rumores que circulan sobre la capacidad de los bancos italianos para financiarse. Como respuesta a estas informaciones, la Asociación Bancaria Italiana (ABI) ha apuntado que “las entidades transalpinas no han tenido ninguna dificultad por el momento para financiarseâ€.
“Italia parece ser lo que inquieta al mercado a pesar de la reducción de la rentabilidad (de la deuda) despuíés de la intervención del BCEâ€, mantiene un operador francíés consultado por Investir.
Además de estos temores, tambiíén se barajan informaciones que apuntan a que la Unión Europea y el Instituto de Finanzas Internacionales (IFI) reflexionan sobre una posible extensión del plan de intercambio de títulos de deuda soberana griega con el fin de incluir obligaciones con vencimiento en 2024 en lugar de 2020.
FITCH, S&P Y MOODY´S CONFIRMAN LA TRIPLE `AAA´
Moody's, Standard&Poor's y Fitch han ratificado esta mañana su calificación `AAA´ para la deuda soberana de Francia con una perspectiva "estable", según Reuters.
Fitch había reiterado por última vez esta calificación crediticia del país galo el pasado 31 de mayo, mientras que S&P reiteró su nota el 23 de diciembre. Moody's, que no reafirma sus calificaciones crediticias, ha hecho una excepción esta vez tras las especulaciones sobre una posible rebaja de la nota de la deuda soberana.
