El Ministro de finanzas irlandíés acertaba al considerar "caótica" la situación generada tras el anuncio del referíéndum en Grecia sobre las medidas de ajuste aprobadas en la última Cumbre Europea. Un detalle: aún no conocemos estas medidas de ajuste. Sí, son uno de los muchos detalles que nos restan por conocer. Una Cumbre cuyas conclusiones obligan a emplear la fe para considerarlas como la base para la solución de la Crisis.
Hace unos meses leía que el Mr. Samarás era considerado por el resto de los líderes conservadores en Europa como un líder impredecible y populista que ha luchado en los últimos tiempos por renegociar las condiciones del rescate a su País. A diferencia de otros países donde el FMI ha hecho hincapiíé en buscar un consenso entre oposición y gobierno sobre las medidas de ajuste, en el caso de Grecia se ha optado ante la gravedad de la situación por descansar la aprobación del Ajuste a la mayoría socialista del Primer Ministro Papandreou. Pero esto ya no es posible.
Ayer el Primer Ministro se encontró con el soporte y al mismo tiempo con la oposición del Partido de Samarás. Por un lado, considerando que la situación límite del País exige aplicar medidas de ajuste. Por otro, pidiíéndole que no sea íél, Papandreou, el que las aplique. ¿Y quíé queda del referíéndum? Todo apunta a que se ha dejado para otro momento. No se ha retirado como tal, tanto el Primer Ministro como el Ministro de finanzas lo han considerado un derecho del pueblo griego, pero no se considera que sea ahora el momento adecuado. Esta situación sin duda incomoda al resto de los líderes europeos que demandan un compromiso claro y contundente de que no habrá otra deriva como la producida esta semana. Pero, ¿está en condiciones el Partido socialista de comprometerse a ello? ¿y la Nueva Democracia?.
Los analistas políticos griegos consideran que podría haber un compromiso del Primer Ministro con su partido de dimitir hoy si gana la moción de confianza. Un tanto irónico. ¿A quiíén entregaría el poder? Son dos las alternativas: uno gobierno de coalición; un nuevo primer ministro dentro del partido socialista. En este último caso de barajan muchos nombres, incluido el expresidente del Banco Central de Grecia Papademos. La alternativa tampoco rechazada por muchos analistas es que se cree un gobierno tíécnico de transición hasta nuevas elecciones, que podrían ser dentro de 3 o 6 meses. Estos mismos analistas tienen muy claro que sea cual sea el partido que ganara estas elecciones pondría el mayor peso de su campaña en renegociar las condiciones de ajuste. Pero, claro, una vez recibido el dinero. Al menos el sexto tramo de 8 bn. ¿Y el resto? Ya veremos.
Por cierto, las conversaciones en el G20 siguieron avanzando para encontrar un soporte financiero internacional a Europa. Sarkozy consideró que hay un deseo de mejorar la coordinación de la política económica a nivel internacional. "Países con superávit están mostrando el interíés por ayudar a afianzar el crecimiento mundial".
Un tema a debate en el G20 fue Italia. El Gobierno italiano presentó nuevas medidas de ajuste, aunque sin hacerlas públicas. El Presidente francíés fue más allá al pedir que en lugar de intenciones quería hechos e implementación de las medidas. Merkel pidió que España e Italia lleven a cabo reformas económicas.