El presidente del BCE asegura que la "política monetaria tiene que ser óptima al nivel de toda la eurozona" y que resolver los problemas específicos de algunos países corresponde a sus gobiernos
EFE - Dublín
El Banco Central Europeo (BCE) no cambiará el curso de su política monetaria, que básicamente se resume en actuar sobre los tipos de interíés, para ayudar a países de la zona del euro con problemas económicos, como España, Irlanda o Portugal, ha señalado el presidente de la institución, Jean Claude Trichet.
En una entrevista publicada hoy en el periódico irlandíés Irish Times y otros periódicos europeos, Trichet asegura que el BCE tiene que defender los intereses de toda la zona del euro y su objetivo principal es asegurar una estabilidad de la inflación -que actualmente está en niveles ríécord desde la creación de la moneda única con un 4% en Los Quince- a medio plazo. Por este motivo, el instituto emisor subió del 4 al 4,25% el precio del dinero a principios de mes.
"Nuestra política monetaria tiene que ser óptima al nivel de toda la eurozona, igual que la Fed (Reserva Federal de EEUU) no miraría los intereses de Misuri, California o Texas", ha afirmado antes de añadir que la responsabilidad a la hora de resolver problemas económicos específicos que afrontan los miembros del euro resta en los Gobiernos nacionales y los parlamentos.
"Hay numerosos aspectos de las políticas económicas que están bajo la responsabilidad de los mismos países, en particular políticas fiscales, políticas estructurales y la supervisión de la evolución de los costes laborales", ha subrayado el presidente del BCE.
Preguntado sobre si lo peor de la crisis crediticia está superada, Trichet ha señalado: "Mi análisis es que estamos experimentando desde el mes de agosto del año pasado una continua corrección del mercado muy significativa con episodios de turbulencia, de un alto nivel de volatilidad y de un comportamiento freníético del mercado.
"Otra vez, es un proceso que continúa"
El presidente del BCE ha resaltado que el rechazo por parte de Irlanda al Tratado de Lisboa no afecta el trabajo de la zona del euro. "Como presidente del BCE, yo quisiera decir que el Tratado de Lisboa no afecta el marco de la Unión Económica y Monetaria y por lo tanto la actual dificultad por la ratificación no afecta en ningún aspecto nuestro trabajo", ha puntualizado. "Como ciudadano, yo espero mucho y tengo confianza en que vamos a encontrar una manera de superar las actuales dificultades", ha añadido.
Sobre el futuro de los tipos de interíés del BCE, Trichet ha dicho que en el futuro el banco hará "lo que es apropiado para conseguir una estabilidad de precios a mediano plazo". El presidente del BCE cree que a inflación puede disminuir en los próximos dieciocho meses. Trichet confía en que haya un retorno progresivo de tipos moderados de expansión económica.