Research In Motion Ltd actualizó las herramientas que entrega a desarrolladores independientes para que puedan crear aplicaciones para su plataforma BlackBerry 10 , cuyo lanzamiento ha sufrido dos retrasos, afirmó la compañía.
Las actualizaciones ayudarán a las aplicaciones a interactuar con otras y hacer uso de la red BlackBerry para entregar notificaciones a los aparatos. RIM tambiíén abrió su App World para permitirle a desarrolladores utilizar un dispositivo de prueba a partir de mayo, para compartir su trabajo entre ellos.
Construir una fuerte galería de aplicaciones para la nueva plataforma de BlackBerry es crucial para su íéxito. RIM lucha por revertir años de freno en las ventas , lanzamientos demorados y decepcionantes productos y un vergonzoso apagón global de su apreciada red.
RIM ha perdido gran parte de su alguna vez dominante participación en el mercado de telíéfonos inteligentes, ahora dividido entre el exitoso iPhone de Apple Inc y los dispositivos que utilizan el programa Android de Google Inc.
Su galería de aplicaciones existente, de las cuales muchas son incompatibles con BlackBerry 10, es mucho menor que las ofertas de Apple y Google.
Las aplicaciones son pequeños programas que realizan tareas específicas como revisar noticias o precios de acciones, calcular distancias de trote o encontrar restaurantes. Tambiíén pueden reproducir contenido como música y películas.
La compañía reportó el mes pasado píérdidas operativas más grandes a lo esperado y dijo que recortaría al menos el 10% de su fuerza laboral, además de aplazar el lanzamiento de BlackBerry 10 al primer trimestre del próximo año. Los primeros aparatos se esperaban inicialmente para inicios de este año.
RIM ha contratado a banqueros para evaluar opciones estratíégicas y no ha descartado una venta de la compañía, aunque sigue enfocándose en el lanzamiento de BlackBerry 10 como su mejor salida a futuro. Tambiíén considera la posibilidad de empresas conjuntas y sociedades, probablemente en conjunto con el cambio a la nueva plataforma.
Las acciones de la compañía, con sede en Waterloo, Ontario, han perdido cerca de un 90% de su valor desde un máximo de unos 70 dólares en febrero del 2011.