La semana arranca con un signo alcista en los mercados. El Nikkei de Tokio se ha disparado otro 1,8%. Previamente, el viernes el S&P 500 cerró con subidas del 0,88%. Ahora los futuros de las bolsas europeas anticipan avances próximos al 0,9%, lo que acercaría el Ibex a los 8.000 puntos.
Los inversores dejan atrás la píérdida de la 'triple A' de Reino Unido. A última hora del pasado viernes la agencia de calificación Fitch dejó a la economía británica sin la máxima calificación, al rebajar el ráting un escalón, hasta AA+, con perspectiva estable. Pero los futuros sitúan hoy incluso al Ftse británico al frente de la remontada de la renta variable europea, con avances del 0,9%. En el Dax alemán y en el Cac francíés las subidas se sitúan entre el 0,7% y el 0,8%.
La reunión del G20 pasó por alto, una vez más, las políticas de estímulos sin precedentes puestas en marcha por Japón. Ni siquiera sus efectos sobre el mercado de divisas fueron objeto de críticas. Hoy el Nikkei de Tokio ha relanado otro 1,89% su rally. A los estímulos monetarios se unen los procedentes de la temporada de presentación de resultados empresariales. Hasta la fecha, el 57% de las compañías europeas que ya han presentado sus cuentas, y el 72% de las estadounidenses, han logrado superar las previsiones de los analistas.
El Ibex apura sus últimas jornadas antes del inicio de la temporada de resultados. El signo alcista de la preapertura acerca el nivel de los 8.000 puntos. Sin duda uno de los principales focos de interíés de la jornada será comprobar cómo digiera Bankia el inicio de cotización de las nuevas acciones una vez realizado el contrasplit de sus títulos.
El sector financiero respira al menos con la tregua que ofrece el mercado de deuda pública. El interíés exigido al bono esapñol a diez años baja incluso del 4,6%, y se sitúa en mínimos desde finales de 2010. La prima de riesgo, a su vez, baja de los 330 puntos, a un paso de sus mínimos del año.
Las compras reaparecen tambiíén en el mecado de materias primas. Despuíés de los sobresaltos de jornadas anteriores, el barril de Brent roza los 100 dólares, el oro afianza los 1.400 dólares la onza, y la plata rebota por encima de los 23 dólares. Todo ello con el euro a un paso de los 1,31 dólares.