El polaco Michal Kwiatkowski se coronó como nuevo campeón del mundo en ruta tras ganar con mucha autoridad en el Mundial de Ponferrada 2014. El ciclista del Omega atacó en los kilómetros finales para romper la carrera y lograr su mayor íéxito. El murciano Alejandro Valverde supo reaccionar y logró la medalla de bronce, la sexta de su carrera, por detrás de Simon Gerrans, que se llevó la plata.
Triunfo más que merecido de Polonia en el Mundial de nuestro país. El combinado polaco fue uno de los que más trabajó durante el día. Ya con la primera escapada del día, la compuesta por Quintero (Colombia), Kvasina (Croacia), Polivoda (Ucrania) y Savickas (Lituania), hizo un sensacional trabajo para reducir considerablemente una ventaja que se había disparado a más de 15 minutos.
Su trabajo hizo que fueran neutralizados ayudados por Italia, que empezó a mover la carrera tal y como estaba previsto. Los australianos, de los que se esperaba algo más, se dejaron ver, pero con cierta timidez. A tres vueltas del final, la prueba entró poco a poco en el caos. Tony Martin era cabeza en solitario con un grupo de perseguidores donde rodaban hombres como Boasson Hagen, Albasini o el español Dani Navarro.
Buen trabajo de la selección española para llevar en volandas a Valverde en la última vuelta
Pero esos movimientos quedaron en nada. A menos de dos para el final, el pelotón volvía a agruparse. La selección dirigida por Javier Mínguez debía entonces empezar a asomar sus cartas. Y no defraudaron. No se inquietaron con la escapada de De Marchi, Gautier y el daníés Valgren, a los que se les uniría Kiryienka justo antes de empezar al última vuelta.
El trabajo de Albasini primero, y de Castroviejo despuíés, sirvió para tener muy controlados a los de delante. Se apartó el vizcaíno para dejar paso a su compañero en el Movistar, Ion Izagirre. Pero no fue hasta el descenso que conducía a la presa donde se empezó a ver clara la situación de carrera. Fue allí, en la temida curva donde muchos corredores se fueron al suelo durante toda la semana, donde Kwiatkowski lanzó su atrevida apuesta.
El polaco conectó rápido con los de delante, a los que dejó atrás en un abrir y cerrar de ojos. Detrás, Dani Moreno tiraba con fuerza. Le siguió Purito y, más tarde, Valverde. El murciano sabía de la importancia de ese tramo y se fue para adelante con Gilbert, Van Avermaet, Breschel, Gallopin y Gerrans. Entre todos pelearon para intentar cazar a Kwiatkowski, que completaba el descenso con una ventaja importante.
Gilbert echó el resto para ayudar a su compañero Van Avermaet, pero ya era tarde. Kwiatkowski llegaba a meta con tiempo para alzar los brazos y besar el escudo de Polonia. El reparto de metales se completaba inmediatamente despuíés con Simon Gerrans logrando la medalla de plata y Alejandro Valverde, la de bronce. Sexta medalla para el ciclista murciano que ya cuenta con dos platas y cuatro terceros puestos. Un importante resultado teniendo en cuenta que el recorrido no era el que más le beneficiaba.
Así pues, el maillot arcoiris ya cuenta con nuevo propietario, Michal Kwiatkowski. El polaco, que estuvo a punto de fichar por el Movistar Team en 2012 para terminar en el Omega, logra su consagración como ciclista en un año donde además ha ganado la Vuelta al Algarve, la Strafe Bianche y una etapa en Romandía, entre otros triunfos. 24 años y ya con un Mundial de ciclismo en ruta para íél y su país, que suma su segunda medalla en esta disciplina tras la plata lograda por Zbigniew Spruch en el año 2000.
