Bloomberg
Singapore Airlines Ltd. quiere que sus clientes de alta gama adopten su lado perezoso.
Los viajeros de clase ejecutiva pueden pretender que están desplomados en una silla junto a la playa a 9 mil 100 metros sobre el nivel del mar o sentir como si estuvieran descansando en un sofá mediante la elección de dos nuevas posiciones de asiento preestablecidas -"Sundeck" y "Lazy Z".
La aerolínea está llevando a cabo su renovación de asientos más costosa en ocho años, para hacerlos más amplios, más largos y equipados con pantallas de televisión más grandes. Con Qantas Airways Ltd. de Australia planeando que los clientes de primera clase duerman de puerta a puerta, y Emirates y Etihad ofreciendo duchas y mayordomos para detenerse en las ciudades glamorosas de Oriente Medio, Singapore Air tiene una cosecha de nuevos desafíos.
"Una renovación evita la deserción a otras compañías", dijo Timothy Ross, el director de investigación de transporte de Asia y el Pacífico en Credit Suisse Group AG en Singapur. "Lo último que los viajeros con un alto poder adquisitivo quieren hacer es pasar tiempo refrescando sus talones en Doha o Abu Dhabi o Dubái. No importa lo bueno que sea el champagne ahí, más bien, preferiría ir directo".
Singapore Air, la tercera mayor aerolínea de Asia por valor de mercado, está llevando a cabo una reforma de 325 millones de dólares a su flota de 777-300ER de Boeing Co. para todas las categorías de precios. La renovación de los 19 777 comienza a principios del año próximo y se prevíé que estíé terminada en septiembre de 2016, dijo Nicholas Ionides, portavoz de la aerolínea.
GANANCIAS
Las compañías asiáticas, como Singapore Air, han perdido clientes de los operadores en el Medio Oriente como Qatar Airways Ltd. y Etihad Airways PJSC, que tienen ofertas de primera clase que incluyen duchas a bordo y servicio de mayordomo, dijo Shukor Yusof, fundador de la firma de investigación de aviación Endau Analytics.
"La renovación o modernización de los productos ya no funciona", dijo. "No es suficiente para persuadir a la gente. Las compañías del Golfo están atacando con todo su poder".
Algo de eso se reflejó ayer, cuando Singapore Air dijo que su utilidad neta del segundo trimestre cayó un 43 por ciento, a 90.9 millones de dólares de Singapur. Las ventas registraron pocos cambios.
"La demanda generalmente se mantiene sin cambios, y los rendimientos seguirán bajo presión en medio de una intensa competencia por parte de otras compañías aíéreas y por las actividades de promoción en los mercados más díébiles", dijo Singapore Air en la declaración de ayer. "El panorama en el que opera la industria de las aerolíneas sigue siendo competitivo y desafiante, mientras persistan las preocupaciones geopolíticas y un panorama económico mundial incierto".