La agencia de calificación de riesgos Standard & Poor’s (S&P) ha decidido mantener el rating de Banco Santander en 'BBB+/A-2' con perspectiva estable tras la ampliación de capital de 7.500 millones de euros que la entidad anunció el pasado jueves.
A travíés de un comunicado, S&P ha destacado que su calificación sobre la entidad que preside Ana Patricia Botín está limitada por la calidad crediticia comparativamente más baja de España. Asimismo, señala la posición de capital del banco como una de sus mayores fortalezas.
Así, el rating a largo plazo de Banco Santander se mantiene en 'BBB', dos escalones por debajo del perfil de críédito de la entidad (‘A-’) y un escalón por encima de la calificación de España. “Esto es porque creemos que hay una probabilidad apreciable de que Santander no dejaría de pagar en el escenario más adversoâ€, indica el comunicado.
Asimismo, consideran que la entidad “requerirá apoyo sistíémico para pasar nuestro test de estríésâ€, por lo que “limitamos la diferencia entre los ratings de Santander y España en un escalón, aunque nuestro criterio permite un máximo de dos escalones