La firma española de banca de inversión y gestión de activos N+1 consolida su expansión internacional ultimando el desembarco en su vigíésimo país, Austria, y cambiando su nombre por Alantra para cohesionar su posición global. A punto de reforzar su apuesta por EE UU, el plan estratíégico a medio plaza pasa por ganar cuota en el sector tecnológico y crecer en Asia.
"Somos una firma que ha hecho muchas cosas en los últimos años, y estamos felices con lo que hemos hecho, pero creo que todos queremos trascender con lo que estamos haciendo. Y eso solo puede hacerse con una institución. Solo las instituciones sobrevivenâ€, expuso el sábado Santiago Eguidazu, presidente de la compañía española de banca de inversión y gestión de activos N+1 para anunciar que desde ahora el nombre de la firma pasa a ser “Alantraâ€, una denominación que busca cohesionar la marca a nivel global tras su fuerte expansión internacional.
Alantra es “una palabra inventada, a la que queremos dotar de significado nosotros, y que se pronuncia prácticamente igual en todos los idiomasâ€, explican desde la firma hasta ahora conocida como N+1. Sus responsables asumen que rebautizarla supone un riesgo a corto plazo, al deshacerse de un nombre bien posicionado en el mercado español, pero lo conciben como un impulso a medio plazo de su imagen global. “Lo que todos los socios hemos decidido es que queremos crear un nuevo proyecto y necesitamos una nueva identidad. Y por eso hemos tomado esta costosa, difícil y peligrosa decisión. Vamos a perder algo bueno al principio, porque cambiar una marca es algo muy serio. Perdemos algo en el corto plazo para crear algo en el largo plazoâ€, resumió el presidente y fundador de la compañía.