Lewis Hamilton salvó en Míéxico la primera bola de partido para Nico Rosberg. Aún necesita salvar una más para llegar con opciones a la última carrera del año, en Abu Dabi. Y lo tendrá que hacer en Brasil, un circuito del que guarda el gran recuerdo de lograr su primer Mundial, pero que le deja mucho otros sinsabores.El inglíés está obligado a ganar la carrera, ya que si lo hace Rosberg el título será para el alemán. Y, visto lo visto, es muy complicado que no venza uno de los dos Mercedes. A partir de aquí, a Hamilton se le plantea un reto mayúsculo, ya que nunca ha conseguido ganar en Interlagos."Nunca he ganado en Brasil, así que voy este fin de semana enfocado a cambiar eso", apunta el piloto de Mercedes. "En tíérminos del campeonato, es un escenario inusual estar luchando por algo sin saber con seguridad si lo vas a conseguir. Un resultado sería doloroso y el otro sería un gran logro. Independientemente, voy a seguir, porque todo puede cambiar en el último momento", asegura.