RENTA FIJA
Otra señal de estabilización del sentimiento del mercado la encontramos en el comportamiento de las curvas de rentabilidades soberanas. Los tipos a largo plazo abandonaron los mínimos en EEUU, repuntaron con cierta intensidad en Europa (con ascenso de las expectativas de inflación) y las pendientes de las curvas volvieron a ampliarse. Con independencia de que puedan aparecer nuevos episodios de huida hacia la calidad y del margen de recortes de tipos en la UEM, la paulatina traslación de exposición desde soberanos a renta fija privada sería el movimiento lógico en los próximos meses.
EL EURO
El dólar se ha visto penalizado por la reducción de la aversión al riesgo en los mercados, materializada en la apreciación de las divisas del espectro emergente. El tipo EUR/USD retorna a niveles de septiembre de 2008. Asimismo, destaca el fuerte castigo sufrido por la libra esterlina (deterioro cíclico, recortes agresivos del Banco de Inglaterra, incremento de la prima de riesgo-país), cotizando ligeramente por encima de la cota de 0,90 EUR/GBP, niveles mínimos históricos. A muy corto plazo, las bajadas de tipos de interíés de la Fed podrían provocar un castigo adicional al dólar, aunque nuestra perspectiva de medio plazo (6 meses vista) de apreciación de la divisa americana no se ve alterada. En el caso de la libra, siendo conscientes de las dificultades que atraviesa la economía británica, pensamos que el castigo que ha experimentado recientemente ha sido excesivo. Entendemos que buena parte del deterioro del crecimiento actual y futuro ya está recogido en la cotización: la libra se encuentra frente al euro un 30% por debajo de su nivel de equilibrio. Entendemos que se trata de una buena oportunidad estructural de compra a 12 meses vista.
RENTA VARIABLE
A pesar de las cesiones del viernes, el saldo semanal de la renta variable global fue positivo, destacando el mejor comportamiento relativo del bloque emergente. A nivel sectorial, hay que resaltar la recuperación de Petróleo y Gas, capitalizando la recuperación del petróleo. La próxima prueba de fuego para las bolsas va a ser la temporada de resultados empresariales 4T08. No obstante, el mercado ya habría puesto en precio un comportamiento muy pobre (caídas de beneficios empresariales en los próximos trimestres superiores al 30%).